Un globo aerostático que transportaba a 35 personas se desplomó bruscamente en una zona rural del municipio de Capela do Alto, estado de San Pablo, Brasil. El incidente dejó como saldo una persona fallecida y al menos diez heridos, según informó la Policía Militar local.

La aeronave había iniciado su vuelo en la ciudad de Iperó y recorrió varios kilómetros antes de la caída. Entre los heridos, una pasajera de 26 años resultó la más afectada tras caer durante la maniobra de aterrizaje.

Operación ilegal y consecuencias legales

La Policía Militar reveló que el globo no contaba con los permisos necesarios para actividades recreativas o turísticas, lo que derivó en la detención del piloto tras el accidente.

Asimismo, la Confederación Brasileña de Globos Aerostáticos informó que el globo no estaba registrado en su entidad con sede en Boituva, ciudad reconocida a nivel nacional por su centro de globos aerostáticos y la realización de eventos aéreos.

Este hecho pone en alerta sobre la seguridad y regulación en las actividades relacionadas con vuelos en globos aerostáticos en la región.