Mientras se acerca la fecha clave del 19 de julio para definir candidaturas, dentro del oficialismo emergen dos posturas: un sector considera que la condena a la exmandataria podría cambiar por completo el tablero electoral, mientras que otro cree que, gane o pierda en tribunales, su figura no debería condicionar los movimientos libertarios.

La discusión gira en torno a cómo encarar la elección en la tercera sección electoral bonaerense, un bastión histórico del peronismo. Allí, algunos operadores cercanos al presidente Milei evalúan modificar sus fichas si Cristina queda fuera del juego. "Podríamos optar por un perfil menos competitivo", deslizaron en reserva.

Entre la estrategia política y el factor emocional

Desde el despacho presidencial evitan hablar del tema en público, pero en privado reconocen que el escenario judicial de la expresidenta no pasa inadvertido. Para algunos dentro de LLA, la eventual condena no es solo un tema legal, sino también simbólico: "Sacás de la cancha a la única que tiene votos", afirman.

Sin embargo, citando a Durkheim, una voz interna señala que los hechos políticos no tienen una sola causa. Por eso, alertan sobre un posible "efecto boomerang": la condena podría reactivar al peronismo, unificándolo detrás de una narrativa de proscripción.

"No cambia nada": el ala dura de LLA no piensa mover sus fichas

Desde el entorno de Karina Milei, quien tiene la última palabra en el diseño electoral, bajan otra línea: nada cambia. "La elección es modelo contra modelo", aseguran con firmeza, descartando cualquier alteración en los planes por lo que pase con Cristina Kirchner.

Incluso ironizan con la idea de que CFK marque los tiempos: "No nos va a sacar a bailar Cristina. Primero tenemos que elegir la música", dijo un funcionario con tono desafiante.

Mientras tanto, avanzan los contactos con el PRO. Este lunes, el armador bonaerense de LLA, Sebastián Pareja, tiene en agenda una reunión con Cristian Ritondo para explorar una posible alianza de cara a las elecciones del 7 de septiembre.

Un outsider contra el kirchnerismo

Por ahora, en LLA trabajan bajo la hipótesis de que Cristina compite. Por eso, preparan una candidatura "pura", sin trayectoria política, que pueda confrontar de manera directa con el modelo kirchnerista. Buscan una figura que sintetice el mensaje libertario y encarne el "anti-CFK".

La estrategia recuerda a lo que fue la campaña en la Ciudad de Buenos Aires, basada en una fuerte polarización. "Queremos a alguien que represente todo lo contrario a lo que simboliza Cristina", afirman.