Cómo el testimonio de un taxista permitió capturar a Pablo Laurta tras el doble femicidio en Córdoba
El conductor relató detalles del angustiante viaje que trasladó a Laurta y a su hijo, clave para que la Policía lo ubicara y detuviera en Entre Ríos.
El taxista que trasladó a Pablo Laurta, acusado del doble femicidio de su expareja Luna Giardina y su madre Mariel Zamudio, reveló detalles escalofriantes del recorrido que terminó siendo crucial para su captura.
El viaje comenzó cerca de la Plaza de los Niños, alrededor de las 11 de la mañana del sábado, y se extendió por ocho horas hasta Gualeguaychú. Según el conductor, el niño de seis años estaba descompuesto y con fiebre, y Laurta solo le ofrecía golosinas. A pesar de la recomendación del taxista de llevarlo a un centro asistencial, Laurta se negó y continuó buscando hoteles donde hospedarse.
Cambios de destino y actitudes preocupantes
Durante el trayecto, Laurta cambió varias veces el destino: primero pidió ir a Concordia, luego decidió dirigirse a Gualeguaychú. El taxista notó que Laurta llevaba únicamente un bolso y una mochila, sin ropa para el niño, y que hablaba con hoteles locales para reservar habitación.
El acusado manifestó su enojo con su expareja y expresó que "le había cagado la vida", mientras su hijo le pedía ir con su mamá. Laurta respondió que no la vería por mucho tiempo, un comentario que impactó profundamente al conductor.
La alerta que permitió la captura
Al día siguiente, el taxista se enteró por los medios del doble crimen y decidió comunicarse con la Policía para brindar todos los detalles del viaje y del destino final de Laurta. Gracias a esta información, las fuerzas de seguridad lograron detenerlo en la habitación 209 del Hotel Berlín, donde secuestraron un arma Bersa calibre .380 con municiones, presuntamente usada en los asesinatos.
El niño fue inmediatamente puesto bajo resguardo y Laurta quedó detenido en Entre Ríos, cerrando uno de los capítulos más impactantes de la violencia de género en Córdoba.