El solsticio de invierno 2025 en el hemisferio sur ocurrirá el viernes 20 de junio, marcando el día más corto y la noche más larga del año. En ese momento, el eje de la Tierra se inclina lo máximo posible alejándose del Sol, lo que hace que los rayos solares lleguen en un ángulo muy bajo y por menos tiempo.

Ese mismo día, el Sol alcanza su punto más bajo en el cielo al mediodía, provocando la mínima duración de luz solar en el año. Desde entonces, las jornadas comienzan a alargarse gradualmente hasta el solsticio de verano, que ocurre en diciembre.

Qué sucede durante el solsticio y por qué es especial

Durante el solsticio de invierno, el hemisferio sur vive su noche más extensa. Este fenómeno astronómico no solo tiene importancia científica -por mostrar cómo la inclinación de la Tierra genera las estaciones-, sino también una fuerte carga simbólica y cultural.

Desde tiempos ancestrales, civilizaciones como los incas, los mapuches y los celtas celebraban el solsticio como el renacimiento del Sol: un momento de reflexión, renovación espiritual y conexión con la naturaleza. Incluso hoy, en muchos países se realizan rituales, fogatas o encuentros para conmemorar esta transición.

El solsticio invita a reconectarse con los ciclos naturales y observar cómo el cielo refleja los ritmos internos de la vida humana y de la Tierra misma.