Tres décadas después, el caso Selena sigue despertando preguntas

Han pasado treinta años desde la muerte de Selena Quintanilla, pero el interés por su historia no disminuye. La artista, que falleció con apenas 23 años, continúa siendo una figura central de la música latina y un referente emocional para varias generaciones. Su legado se mantiene vivo en redes sociales, documentales y en la memoria activa de sus seguidores.

En este nuevo contexto de revisiones y análisis, la publicación de su autopsia original por parte de medios estadounidenses volvió a abrir el debate sobre los detalles médicos de aquel 31 de marzo de 1995, cuando la cantante fue asesinada por Yolanda Saldívar, entonces presidenta de su club de fans y figura cercana a la familia.

El rumor que se instaló durante años y la evidencia que lo desmiente

A lo largo del tiempo circuló una teoría entre los fans que sostenía que Selena no habría recibido una transfusión de sangre por motivos religiosos, ya que su familia pertenece a los Testigos de Jehová. El mito se instaló con fuerza y generó dudas sobre si aquella decisión podría haber cambiado el desenlace.

La autopsia completa y los reportes médicos de la época permiten descartar esa versión. Según el informe forense, Selena perdió casi toda la sangre del cuerpo en cuestión de minutos. La bala ingresó por la espalda y rompió la arteria subclavia, una de las más importantes del organismo. Cuando una arteria de ese calibre se secciona, la pérdida de sangre es tan rápida que el margen de supervivencia es extremadamente reducido.

El propio padre de la cantante ha afirmado que sí se realizaron transfusiones, pero que la hemorragia era irreversible al momento de su llegada al hospital.

Una herida letal: qué revelan los detalles de la autopsia

El documento médico describe una lesión devastadora: la bala atravesó costillas, un pulmón y salió por el pecho. El colapso del sistema circulatorio fue inmediato, lo que dejó sin posibilidades reales de estabilización incluso con atención urgente.

Los especialistas consultados coinciden en que no hubo error médico ni decisiones polémicas: fue el tipo de herida, no la falta de transfusión, lo que terminó con la vida de Selena. Llegó al hospital en estado crítico y, según los registros, ya presentaba muerte cerebral al ingresar.

Yolanda Saldívar, tres décadas después

Mientras el caso vuelve a ocupar titulares, Yolanda Saldívar continúa cumpliendo su condena. En 2025 solicitó por primera vez la libertad condicional, pero fue rechazada. Podrá volver a pedirla en 2030.