Cierre de listas en Buenos Aires: Karina Milei se impuso, el PJ evitó la ruptura y Caputo quedó relegado
Con tensiones hasta la madrugada, el peronismo logró un acuerdo de último momento. Karina Milei lideró el armado libertario y desplazó a Santiago Caputo. El PRO mantuvo lugares clave y la interna estalló en todos los frentes.
El cierre de listas en la provincia de Buenos Aires fue una verdadera batalla política. En el peronismo, los tironeos entre La Cámpora, el Frente Renovador y el espacio de Axel Kicillof llevaron la discusión hasta la madrugada. Finalmente, se logró un acuerdo para evitar la ruptura: Verónica Magario y Gabriel Katopodis encabezarán en las secciones clave. Máximo Kirchner, aunque ausente físicamente por una intervención médica, logró retener la mayoría en la lista.
Sin embargo, el reparto de bancas no respetó el pacto original y quedaron heridas abiertas. El armado se concretó a contrarreloj, con internas abiertas, cajas sin firmas completas y recursos judiciales de por medio. El escenario, lejos de la unidad, mostró un peronismo desgastado que resiste como puede el avance libertario.
Milei, con Karina al mando, desplazó a Caputo
Del otro lado, La Libertad Avanza cerró sus listas con Karina Milei como figura central del armado bonaerense. La hermana del presidente se impuso en la pulseada interna y relegó a Santiago Caputo, quien apenas logró ubicar al secretario de Culto en un lejano quinto lugar. La alianza con el PRO incluyó nombres fuertes como Diego Valenzuela y Guillermo Montenegro, con aspiraciones provinciales y nacionales.
Sin embargo, no todos los intendentes amarillos aceptaron el acuerdo: varios se alinearon con nuevos espacios como Somos Buenos Aires, liderado por Juan Schiaretti, Randazzo y Stolbizer, que buscan ganar terreno en el conurbano y en el interior.
El trasfondo: poder, reelección y la Corte bonaerense
Más allá del cierre de listas, lo que está en juego es mucho más profundo. Milei apuesta todo a la elección del 7 de septiembre como trampolín para su reelección en 2027. El PJ, mientras tanto, defiende cada distrito como si fuera el último bastión. La pelea por la presidencia de la Cámara de Diputados provincial, que administra un presupuesto de $152 mil millones, es solo una parte del botín en disputa.
Además, la Corte Suprema bonaerense, con cuatro vacantes a cubrir en 2026, se convirtió en un terreno clave. La pulseada entre jueces, los escándalos judiciales y el futuro del poder en la provincia también influyeron en este cierre caótico.