Pidieron la detención del empresario acusado de abusos a los compañeros de su hijo del colegio
La querella y la fiscalía reclamaron la indagatoria y detención del empresario Marcelo Porcel tras reunir testimonios y peritajes que lo vinculan con presuntos abusos y corrupción de menores. La causa avanza, pero aún no hay convocatoria judicial.
El abogado de las familias denunciantes solicitó formalmente la indagatoria y detención de Marcelo Eduardo Porcel, de 51 años, al considerar que las pruebas reunidas describen un patrón de conducta reiterado. Desde la querella cuestionaron la falta de definiciones del juez a cargo, pese a la gravedad de los elementos incorporados al expediente.
Según la presentación, los avances logrados hasta ahora se sostuvieron principalmente por el impulso de las víctimas y sus representantes, mientras se mantienen medidas restrictivas que prohíben el acercamiento del imputado a los adolescentes.
Qué dicen las denuncias y las pruebas
La investigación reúne declaraciones de al menos diez adolescentes, compañeros del hijo de Porcel en el Colegio Palermo Chico. Los testimonios describen encuentros en domicilios y oficinas del empresario, donde habría incentivado el consumo de alcohol, desafíos pagos y apuestas digitales.
Entre las evidencias figuran peritajes informáticos y material hallado en dispositivos secuestrados, además de relatos tomados en Cámara Gesell. Para los denunciantes, estos elementos refuerzan la hipótesis de abuso sexual agravado y corrupción de menores.
Riesgo de reiteración y alerta de la querella
Tanto la querella como el Ministerio Público Fiscal advirtieron sobre el riesgo de que el acusado pueda buscar nuevas víctimas si continúa en libertad. Señalan que los vínculos escolares habrían sido utilizados como vía de contacto con chicos de entre 13 y 14 años.
El abogado de las familias insistió en la necesidad de una pena de cumplimiento efectivo y remarcó que la falta de una detención preventiva deja expuestos a otros menores.
Cómo sigue la causa
El expediente tramita en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°50, con intervención de la Fiscalía N°1. Por ahora, Porcel tiene prohibido acercarse a las víctimas y a los espacios que frecuentan, como el colegio y el club GEBA.