El presidente Javier Milei busca acelerar la sanción del Presupuesto 2026 y las reformas laboral, tributaria y del Código Penal, mientras planifica la segunda etapa con la previsional. Para lograrlo, la Casa Rosada implementa reuniones individuales con gobernadores, promesas de fondos y negociaciones caso por caso, lideradas por el ministro del Interior, Diego Santilli.

Hasta ahora, se han conseguido avances con la mayoría de las provincias, aunque Buenos Aires, La Rioja, Tierra del Fuego y Formosa permanecen al margen de los acuerdos. La distribución de ATN, los impuestos, la reanudación de obras públicas y fondos para cajas previsionales son temas pendientes de definición.

En paralelo, La Libertad Avanza sumó nuevos diputados provenientes del PRO, alcanzando 93 miembros en la Cámara Baja y quedando cerca de los 96 del PJ, lo que podría convertirlos en la primera minoría si algunos legisladores provinciales se suman al bloque libertario.

El conflicto con Tapia y la AFA

La tensión entre Milei y Claudio "Chiqui" Tapia resurgió tras el escándalo por la coronación de Rosario Central y la sanción a Estudiantes de La Plata. Milei ha utilizado las redes para cuestionar la influencia de Tapia y su mano derecha Pablo Toviggino en decisiones de escritorio que afectan al fútbol argentino.

La intervención del presidente de la Nación en la AFA se ve limitada: Tapia cuenta con el respaldo de la Conmebol y de la FIFA, liderada por Gianni Infantino, lo que desalienta cualquier intento gubernamental directo sobre el fútbol profesional.

Patricia Bullrich, senadora y exministra de Seguridad, se posiciona como referente desde el Congreso para fiscalizar los vínculos entre Tapia, Toviggino y los clubes. Actualmente, la justicia investiga a la financiera Sur Finanzas y a siete clubes por presunto lavado de dinero y evasión fiscal, incluido Racing, San Lorenzo y Banfield, entre otros.

Prioridades y advertencias en la Casa Rosada

En el entorno de Milei advierten que la prioridad debe estar en el Congreso, donde se librará la "madre de todas las batallas" para los libertarios. La pelea con Tapia es vista como un terreno complicado que podría desgastar al Presidente, mientras los esfuerzos de Santilli y la presión sobre los legisladores buscan consolidar la aprobación de las reformas y el Presupuesto.