El líder del PRO, Mauricio Macri, encabezó este lunes una cumbre partidaria en la sede nacional del partido, en la que participaron gobernadores, intendentes y legisladores del espacio. En medio de una creciente tensión con el Gobierno, el encuentro sirvió para reforzar la postura de colaboración con el presidente Javier Milei, a la vez que se reiteró el rechazo a una posible fusión con La Libertad Avanza.

"Vamos a apoyar para que le vaya bien al Gobierno, más allá de que cada uno esté parado en su identidad", aseguró el diputado Diego Santilli al término de la reunión. "El PRO es un espacio que ayuda al Gobierno de Javier Milei para que le vaya bien, para que la Argentina crezca y se desarrolle. Desde su identidad, ayuda a este Gobierno", añadió Santilli, dejando en claro que no se trata de una discusión de condicionamientos.

Durante el encuentro, que comenzó a las 16:00 horas, se abordaron temas clave como el trabajo conjunto para acompañar un proceso de reducción de la inflación y la implementación de la Ley Bases, recientemente sancionada. Santilli también aclaró que no se discutió el tema de la coparticipación, que, según él, "está encaminado".

La cumbre contó con la presencia de destacados referentes del PRO, tanto de manera presencial como virtual. Además de Macri, participaron los intendentes Soledad Martínez (Vicente López) y Guillermo Montenegro (General Pueyrredón), el jefe de bloque del PRO en Diputados, Cristian Ritondo, los diputados María Eugenia Vidal y Diego Santilli, el secretario general del partido, Facundo Pérez Carletti, y el exsecretario de la Presidencia de Macri, Fernando de Andreis. A través de videoconferencia, se conectaron los gobernadores de Chubut, Ignacio NACHO Torres, y de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, así como el jefe de gobierno porteño, Jorge Macri.

Previo a la cumbre, desde el sector del PRO leal a Macri, se ratificó la negativa a una fusión con La Libertad Avanza, calificando esta posibilidad como "imposible". Esta postura había sido definida en una tensa asamblea partidaria a principios de julio, en contraposición a la propuesta impulsada por Javier Milei y Patricia Bullrich. Desde el macrismo insistieron en que, si bien apoyan ciertos proyectos del Gobierno en el Congreso, no están "cogobernando".

La cumbre se desarrolló en un contexto de fuertes tensiones entre el Gobierno y el PRO, con intercambios públicos y gestiones por parte de la administración de Milei para avanzar hacia una fusión electoral con el partido de Macri, pero excluyéndolo a él de las negociaciones. Mientras tanto, la Casa Rosada fortaleció sus contactos con el jefe de bloque del PRO en Diputados, Cristian Ritondo, y con el legislador Diego Santilli, aunque sin involucrar a Macri en estos diálogos.