Luego de atravesar su peor racha histórica sin victorias, Boca encontró alivio con dos triunfos consecutivos ante Independiente Rivadavia y Banfield. Pero más allá de lo futbolístico, hubo un punto de inflexión fuera de la cancha. Según contaron dos referentes del plantel, una charla profunda entre los jugadores fue clave para revertir el mal momento.

Rodrigo Battaglia ya había adelantado que el quiebre se dio tras la dura caída frente a Huracán. Ahora fue Juan Barinaga quien puso más luz sobre esa conversación, destacando el cambio de energía que generó puertas adentro.

"Nos miramos a la cara y dijimos basta": el clic emocional del equipo

En diálogo con Radio Continental, Barinaga reveló cómo vivieron ese momento bisagra: "Contra Huracán fue durísimo. Sentimos que no nos salió nada, que nos pasaron por encima. Ahí dijimos que no podíamos seguir así, que había que decir las cosas de frente", expresó el lateral.

El ex Belgrano también destacó que, más allá del rendimiento ante Racing -donde el equipo no brilló-, hubo una energía completamente diferente dentro del campo. "Se sintió en el ambiente, en cómo nos hablamos, en la actitud", sostuvo.

La conclusión a la que llegaron los futbolistas fue clara: el problema era mental. "No importaba el contexto, había que salir a ganar. Esta camiseta exige eso", agregó.

Competencia al rojo vivo: Barinaga y su lucha por un lugar

Desde la vuelta de Miguel Ángel Russo, el DT comenzó a mover fichas para recuperar la identidad de juego. Uno de los cambios más notorios se dio en la defensa, donde Juan Barinaga se ganó un lugar como titular, en una posición altamente competitiva.

"En Boca no te podés relajar ni un segundo", confesó. "Luis Advíncula y Lucas Blondel son jugadores de selección. Competir con ellos es durísimo, pero eso también te obliga a estar siempre al 100%".

Una nueva mentalidad para lo que viene

La charla entre los jugadores parece haber sido más que una catarsis: fue un verdadero punto de partida. Boca no solo cortó la racha negativa, sino que recuperó algo más importante: la actitud competitiva que siempre lo caracterizó.

Ahora, con el envión anímico y una renovada confianza, el Xeneize buscará consolidarse en zona de clasificación y dejar atrás definitivamente uno de los capítulos más oscuros de su historia reciente.