La canasta de crianza superó los $570.000 para chicos de 6 a 12 años en noviembre

El impacto económico de la crianza en los hogares se profundiza.

El costo mensual de la canasta de crianza para niños y adolescentes en noviembre alcanzó un valor superior a los $570.000, según el último informe del Indec. Esta medición, que se actualiza mensualmente, tiene como objetivo visibilizar la carga económica de criar a un niño, considerando tanto los bienes y servicios necesarios para su desarrollo como el tiempo destinado a su cuidado.

Costo por grupo etario

El detalle de los valores según la franja etaria es el siguiente:

Menores de 1 año: $450.355

Niños de 1 a 3 años: $535.823

Niños de 4 a 5 años: $454.165

Niños de 6 a 12 años: $571.106

El desglose muestra que, en el caso de los bebés menores de un año, el costo de bienes y servicios asciende a $142.416, mientras que el cuidado representa $307.939. En el caso de los niños de 1 a 3 años, los bienes y servicios suman $183.892 y el costo del cuidado es de $351.930 mensuales.

Composición del costo

El componente de bienes y servicios se calcula en base a la Canasta Básica Total (CBT) del Gran Buenos Aires, que abarca rubros como alimentos, vestimenta, transporte, educación, salud y vivienda. Por otro lado, el costo del cuidado se deriva de la valorización de las horas necesarias para atender a los niños, tomando como referencia los salarios del personal de casas particulares.

La canasta de crianza tiene un doble objetivo: visibilizar el impacto económico que implica la crianza y aportar información relevante para la formulación de políticas públicas dirigidas a la infancia y la niñez.

Otros datos económicos

En el mismo informe, el Indec también destacó que la inflación oficial de noviembre fue del 2,5%, con un aumento cercano al 4% en la canasta básica alimentaria y la canasta básica total. En lo que va del año, estos indicadores acumulan aumentos del 26,1% y 22,7%, respectivamente. Este comportamiento contrastó con la evolución de la inflación desagregada, donde los rubros como alimentos y bebidas, y servicios públicos, mostraron subas más moderadas.

El análisis de estos datos resalta las inconsistencias entre los índices oficiales y la realidad económica que enfrentan las familias en Argentina.

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