Dos días después de las elecciones legislativas nacionales, en las que el Frente Tucumán Primero logró retener sus dos bancas en Diputados, el gobernador Osvaldo Jaldo reflexionó sobre el escenario político y marcó el rumbo que seguirá la provincia en su vínculo con la Nación.

En diálogo con Panorama Tucumano, el mandatario provincial aseguró que "la pirotecnia electoral llegó a su fin" y que comienza una etapa de diálogo institucional. "Para mí las elecciones terminaron. Nosotros vamos a mantener la unidad en Tucumán porque hay que priorizar la gestión del gobierno", sostuvo.

Además, reafirmó su postura conciliadora: "Voy a seguir siendo una provincia dialoguista. Nunca lo he dejado de ser".

Jaldo aclaró que la vocación de diálogo no implicará ceder ante los intereses nacionales, sino sostener la defensa de los recursos provinciales. "Yo voy a seguir reclamando lo que a Tucumán por ley le corresponde", remarcó.

Sobre el rol de los legisladores tucumanos en el Congreso, el gobernador advirtió que "no votarán en contra del pueblo", aunque pidió "flexibilizar posturas políticas que ayuden a la gobernabilidad del país" y eviten "la oposición por la oposición misma".

Obras, gestión y relación con el Gobierno nacional

Jaldo destacó que el Bloque Independencia contribuyó a viabilizar obras clave para Tucumán. "Hoy estamos ejecutando obras por un monto de casi 500 millones de dólares", subrayó, y aprovechó para reconocer públicamente al ministro de Economía, Luis Caputo, "por haber dado prioridad a la obra del aeropuerto".

El gobernador cerró su análisis con una mezcla de optimismo y realismo político: celebró el triunfo que consolidó la unidad del peronismo en Tucumán, pero dejó en claro que su gestión seguirá orientada a construir puentes con la administración nacional.