El jefe de Gabinete Guillermo Francos protagonizó este jueves un episodio de alta tensión en el Senado, cuando decidió abandonar el recinto tras ser calificado como "mentiroso" por la senadora Cándida López, del interbloque Unión por la Patria. El funcionario libertario estaba brindando su informe de gestión, tal como lo establece el artículo 101 de la Constitución Nacional, pero se retiró antes de finalizar.

"No tolero que me falten el respeto. ¿Para qué me voy a quedar, si no me creen?", dijo Francos a la prensa antes de abandonar la Cámara alta. Más tarde, publicó un descargo en redes sociales donde reafirmó su decisión:

"Decidí no permanecer ante las faltas de respeto y acusaciones fuera de lugar".

Repercusiones y respaldo del Gobierno

La actitud de Francos fue respaldada por la Casa Rosada. El vocero presidencial Manuel Adorni afirmó en X:

"Una persona de la talla de Francos no tiene por qué tolerar la falta de respeto de quienes usan el Congreso como tribuna electoral".

En tanto, dentro del bloque kirchnerista hubo cruces internos. El jefe del interbloque, José Mayans, pidió orden e incluso intervino para calmar a su compañera de bancada: "Pero pará un poquito, che", se le escuchó decir durante la transmisión oficial.

Ante el revuelo, el Senado convocó nuevamente a Francos para que retome su informe el próximo miércoles a las 11.

Insólito pedido de indulto para Cristina Kirchner

En medio del debate, otra senadora K, Silvina García Larraburu, sorprendió al solicitar públicamente que el presidente Javier Milei indulte a Cristina Fernández de Kirchner, quien cumple prisión domiciliaria tras la condena por la causa Vialidad.

"Entrar a una elección con la principal referente de la oposición encerrada no le hace bien al Gobierno", dijo la legisladora rionegrina, y agregó:

"No podemos dejar las decisiones estratégicas en manos de quienes, en mesas de vinos caros, definen el destino de nuestros dirigentes".

El insólito pedido generó desconcierto y reforzó el clima de tensión en una sesión que terminó sin cierre formal, tras un caótico cuarto intermedio.