Escándalo por vínculos con un narco: el Gobierno se despega de Espert y le exige explicaciones
Manuel Adorni aclaró que la Casa Rosada no responde por el diputado de La Libertad Avanza, envuelto en una polémica por pagos y vuelos compartidos con Fred Machado, un empresario acusado de narcotráfico.
Adorni: "No somos voceros de Espert"
En plena conferencia de prensa, el vocero presidencial Manuel Adorni fue tajante al marcar distancia entre la Casa Rosada y el diputado José Luis Espert. "No hablo en nombre de él ni soy su vocero", afirmó, al ser consultado por el presunto vínculo del legislador con Fred Machado, un empresario detenido por narcotráfico.
El Gobierno dejó en claro que las explicaciones sobre este caso deben provenir exclusivamente del propio Espert. "Está obligado a responder todo lo que haga falta. Nosotros estamos comprometidos con la transparencia", remarcó Adorni.
El video de Espert y el respaldo de Milei
Frente al revuelo mediático, Espert publicó un video en sus redes sociales donde negó cualquier relación irregular con Machado. Admitió haber recibido 200 mil dólares y haber viajado en el avión del empresario, pero aseguró que todo fue parte de su actividad profesional antes de lanzarse a la política.
Milei, por su parte, salió a respaldarlo vía X (ex Twitter): "El Profe desmontando la inmunda y burda operación montada por el kirchnerismo".
Para el Gobierno, ese mensaje del Presidente fue suficiente. "La postura del mandatario fue clara. No hay mucho más que agregar", dijo Adorni al ser consultado sobre el tema.
Vuelos, pagos y versiones encontradas
Según se reveló, Espert compartió al menos cinco vuelos con Fred Machado, y recibió una suma significativa de dinero por la presentación de su libro en 2019. El legislador insiste en que no se trató de fondos de campaña ni de dinero público, sino de un pago legal por servicios privados, emitido por una empresa, no por Machado directamente.
"Jamás recibí fondos de origen dudoso. Todo está debidamente justificado", aseguró el diputado.
Sin embargo, la polémica sigue creciendo y la presión mediática también. Mientras tanto, el Gobierno intenta contener el daño político, marcando distancia sin romper del todo con uno de los referentes de su espacio.