Chile celebra este domingo unas elecciones presidenciales decisivas, en las que por primera vez el voto será obligatorio para mayores de 18 años. En medio de un clima de tensión social, inseguridad y debate migratorio, ocho candidatos buscan suceder al presidente Gabriel Boric, aunque todas las encuestas coinciden: el país se encamina hacia un balotaje el 14 de diciembre.

La candidata oficialista Jeanette Jara, del Partido Comunista, y José Antonio Kast, referente del Partido Republicano y el aspirante más duro de la derecha, aparecen como los favoritos para avanzar a la segunda vuelta. El escenario marca una contienda polarizada y un probable giro político hacia posiciones conservadoras.

Cinco fuerzas buscan llegar al balotaje, pero solo dos tienen chances reales

Según los sondeos, Jara será la más votada en primera vuelta, pero enfrentaría un panorama adverso en un eventual balotaje frente a cualquiera de los tres candidatos de la derecha: Kast, Evelyn Matthei (Chile Vamos) y Johannes Kaiser (Partido Libertario Nacional). Entre los tres suman más del 50% de intención de voto, un bloque que se consolida como la alternativa dominante para la segunda vuelta.

Más atrás aparecen Franco Parisi, del Partido de la Gente; Marco Enríquez-Ominami; Harold Mayne-Nicholls; y Eduardo Artés, del Partido Comunista Acción Proletaria, sin chances estadísticas de competir por la presidencia.

Analistas como Marta Lagos y Ascanio Cavallo coinciden: "Chile ya se movió hacia la derecha", y una victoria oficialista en segunda vuelta luce "muy improbable".

Seguridad, migración y economía: los ejes que definirán la elección

El crecimiento de la delincuencia, la presión migratoria y el desgaste del gobierno de Boric marcan la agenda electoral. José Antonio Kast se fortalece con un discurso de mano dura, rechazo al matrimonio igualitario y afinidad con la extrema derecha internacional, incluyendo guiños a Donald Trump y al partido español Vox. Incluso llegó a asegurar que "Pinochet votaría por él".

Evelyn Matthei, con un perfil más moderado pero también marcada por su pasado familiar vinculado a la dictadura, intenta capturar el centro. Kaiser, en tanto, propone un modelo económico similar al del argentino Javier Milei, con desregulación extrema y recorte del Estado.

Jara, desde el oficialismo, se muestra moderada pese a su militancia comunista, pero la pérdida de capital político del gobierno y el malestar social le restan competitividad en un eventual balotaje.

Este domingo, más de 15,7 millones de chilenos elegirán presidente, 155 diputados, 23 senadores y autoridades regionales, en una jornada que podría redefinir el mapa político del país y marcar un viraje decisivo hacia la derecha.