El precio de la carne se estabiliza en marzo tras el aumento de febrero: ¿qué se espera para la inflación?

Se espera que este comportamiento continúe en las próximas semanas.

Después del sacudón de febrero, que alteró las previsiones inflacionarias, el precio de la carne arrancó marzo con una tendencia más tranquila, lo que podría ser un factor clave en la desaceleración de la inflación. En febrero, los incrementos en el precio de la carne obligaron a ajustar las previsiones inflacionarias, pero en la primera semana de marzo, la suba fue mínima, lo que permitió frenar el impacto que generó el mes anterior.

De acuerdo con el informe de la consultora LCG, en la primera semana de marzo, el precio de la carne subió solo un 0,2%, aportando apenas un 0,07% a la suba general de 0,8%. Este comportamiento se aleja considerablemente del aumento del 6,2% registrado en febrero, que tuvo una incidencia de 1,91% en la inflación de alimentos.

Impacto de la carne en la inflación y el consumo familiar

El consumo de carne sigue siendo uno de los componentes más importantes en los gastos de los hogares argentinos, a pesar de la caída en el consumo per cápita en los últimos años, por razones económicas y de salud. Según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec, la carne y sus derivados representan cerca del 10% del gasto total de los hogares, un porcentaje que es aún mayor en el Interior del país.

Por lo tanto, los precios de la carne tienen un impacto directo y significativo en la inflación. Las fluctuaciones de este producto inciden más que otros en la variación del costo de vida, y cuando el precio se estabiliza, puede ser un factor importante para moderar la inflación general.

Lo que se espera para el resto de marzo

Aunque la primera semana de marzo mostró una leve suba, las expectativas están puestas en el comportamiento de los precios en el resto del mes. En comparación con otros productos alimenticios, la carne registró el aumento más bajo en marzo, con un 0,2%, mientras que otros rubros como productos lácteos y huevos, y verduras y frutas, tuvieron incrementos más significativos.

A pesar de la ligera calma en el inicio del mes, el impacto de los aumentos de febrero sigue presente, con una variación intermensual del 5,3% en las carnes, el rubro con el aumento más alto en la medición de LCG.

Esta nota habla de: