El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires lanzó este miércoles una licitación pública para concesionar el uso y explotación del Obelisco por un período de cinco años. La medida, publicada en el Boletín Oficial, implica la privatización temporal del espacio ubicado en la Plaza de la República, uno de los puntos más emblemáticos del país.

La concesión incluye el Obelisco en sí, ubicado en Av. Corrientes 1051, Cerrito 401 y Av. 9 de Julio, y también el edificio donde funciona el Centro de Monitoreo Urbano (CMU) sobre Diagonal Norte, en el barrio de San Nicolás.

¿Cuánto costará la concesión?

La Ciudad fijó un canon base de $14,5 millones, según una tasación del Banco Ciudad, para otorgar el derecho de explotación onerosa de estos espacios. La adjudicación será a través de una licitación de etapa única, bajo los términos establecidos por la Ley N° 2.095, su texto consolidado por la Ley N° 6.764 y el Decreto Reglamentario N° 129/GCABA/23.

¿Qué se puede hacer con el Obelisco?

El pliego de licitación habilitaría al adjudicatario a administrar y explotar comercialmente el espacio público, lo que podría incluir actividades turísticas, culturales o de entretenimiento, siempre bajo regulación y supervisión estatal.

Aunque aún no se publicaron los detalles completos de los usos permitidos, el contexto del nuevo mirador panorámico y la instalación del ascensor indican un fuerte impulso a su aprovechamiento como atracción turística.

El ascensor del Obelisco: el nuevo atractivo

Este llamado a licitación llega semanas después de que se inaugurara el nuevo ascensor panorámico del Obelisco, una obra que permite a los visitantes llegar a la cima del monumento y disfrutar de una vista 360° de la Ciudad.

El jefe de Gobierno, Jorge Macri, celebró la obra:

"Este gran proyecto de ingeniería revaloriza uno de los símbolos porteños. El mirador panorámico es un nuevo atractivo turístico que cambiará la manera de ver nuestra Ciudad y su patrimonio, como en las grandes metrópolis del mundo".

El ascensor cuenta con una estructura mixta: un lado vidriado y otro con pantalla digital, brindando una experiencia inmersiva durante el ascenso.