Diputados debaten cambios a los DNU: la oposición busca limitar el poder del Gobierno

La Cámara baja tratará el proyecto que reduce el margen del Ejecutivo para gobernar por decretos. El oficialismo, en alerta.

Los bloques opositores impulsarán este martes en la Cámara de Diputados el debate del proyecto que ya cuenta con media sanción del Senado y que busca restringir el uso de decretos de necesidad y urgencia (DNU).

La discusión se abrirá en plenario de comisiones desde las 12, con la intención de firmar dictamen el 30 de septiembre y llevarlo al recinto el 1 de octubre en una sesión especial. Allí también se sumarán otros temas, como los cambios al Impuesto a los Combustibles y el rechazo al veto presidencial sobre los fondos de ATN.

El uso de los DNU bajo la lupa

Los DNU fueron incorporados en la reforma constitucional de 1994 como una herramienta excepcional para responder a situaciones de emergencia. Sin embargo, distintos gobiernos recurrieron a ellos de forma habitual, aun sin razones extraordinarias que lo justificaran.

La ley de 2006, promovida por Cristina Kirchner, blindó aún más a los decretos: con el aval de una sola cámara quedaban en pie, mientras que para rechazarlos se requería el voto negativo de ambas. Eso hizo casi imposible anularlos, aunque en la gestión de Milei hubo casos puntuales en los que prosperó el rechazo, como los decretos sobre la SIDE, Vialidad, el INTA, el INTI y organismos de Cultura.

Qué propone la nueva iniciativa

El proyecto que ahora discute Diputados plantea un cambio profundo: bastaría con el rechazo de una sola cámara para dar de baja un DNU.

Además, se introduce un plazo máximo de 90 días desde su publicación en el Boletín Oficial para que el Congreso lo convalide; de no hacerlo, perdería validez. También se acorta a 48 horas el tiempo que tiene una cámara para comunicar su decisión a la otra, y se establece que si un DNU es rechazado, el Ejecutivo no podrá insistir sobre la misma materia durante el mismo año parlamentario.

Con estas modificaciones, la oposición busca recortar la discrecionalidad presidencial y recuperar margen de control legislativo frente a un Gobierno que depende con frecuencia de esta herramienta para avanzar con sus políticas.