Mantener el celular conectado mientras dormimos puede parecer inofensivo, pero en realidad interfiere con la calidad del sueño. 

Las notificaciones, actualizaciones automáticas y la exposición constante a la luz azul dificultan que el cerebro se relaje y produzca melatonina, la hormona responsable de regular el sueño. 

Desconectar el Wi-Fi antes de dormir ayuda a reducir estas interrupciones, permitiéndote conciliar el sueño más rápido y disfrutar de un descanso más profundo.

Beneficios para tu salud y bienestar digital

Apagar el Wi-Fi también tiene efectos positivos sobre la salud mental y la higiene digital. Cuando el teléfono está conectado, la mente permanece en alerta, esperando mensajes o avisos. Esto retrasa la desconexión del entorno digital y puede generar insomnio o fatiga crónica. Además, reducir la exposición a ondas electromagnéticas mientras dormimos, aunque aún se estudia su impacto, es una medida preventiva recomendada por especialistas para crear un ambiente nocturno más saludable.

Ventajas para tu celular y seguridad digital

El simple gesto de desconectar la conexión mejora el rendimiento del teléfono. Sin Wi-Fi activo, el dispositivo no realiza búsquedas de redes ni ejecuta tareas en segundo plano, lo que ahorra batería y disminuye el desgaste interno. Esto prolonga la vida útil del celular y asegura un funcionamiento más estable al día siguiente. Además, desde el punto de vista de la seguridad digital, apagar la conexión reduce las posibilidades de accesos externos o ataques maliciosos, brindando una capa extra de protección mientras dormimos.