Crisis educativa: en 21 provincias los salarios docentes retrocedieron una década
La eliminación del FONID, el recorte presupuestario y la ausencia de paritaria nacional profundizaron el deterioro del sistema educativo. Universidades y escuelas advierten que el financiamiento ya no alcanza.
Salarios por el piso y provincias sin margen
La educación pública atraviesa el ajuste más fuerte de las últimas décadas. En 21 provincias, los salarios docentes están hoy por debajo de los niveles de hace diez años, en un contexto marcado por la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), el recorte presupuestario y la disolución de la paritaria nacional. El combo de medidas trasladó el peso del ajuste directamente al bolsillo de maestras y profesores y a las arcas provinciales.
Según un informe de Osvaldo Giordano (IERAL), María Sol Alzú y Martín Nistal (Argentinos por la Educación), los sueldos de 2025 son más bajos que los de 2014 en todas las jurisdicciones, excepto Chaco, Santiago del Estero y Río Negro. Incluso con una leve recuperación frente a 2024 -año de fuerte recesión-, la mayoría de las provincias sigue por debajo de los niveles de 2023.
Las brechas también se ampliaron por región. En Cuyo solo San Juan mostró alguna mejora este año, mientras que San Luis cayó con fuerza y Mendoza se mantiene estable pero sin recomponer poder adquisitivo. En el NOA, los salarios volvieron a bajar en Salta, Catamarca y Tucumán, y todas las provincias quedaron por debajo de 2023. En el NEA, Misiones continúa entre las jurisdicciones más relegadas. En la región Pampeana hubo un leve repunte en Córdoba y Entre Ríos, aunque insuficiente para recuperar terreno. En la Patagonia, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego registran algunos de los salarios más altos del país, pero todavía por debajo de 2023.
El deterioro salarial se agrava por la eliminación del FONID, que representaba entre el 7% y el 10% del salario docente. A esto se suman la declaración de la educación como servicio esencial y los cambios en la paritaria establecidos por el Decreto 341/2025, que limitaron el derecho a huelga y descentralizaron las negociaciones.
Presupuesto en caída y un 2026 con más recortes
El recorte educativo no se expresa solo en los sueldos. Entre 2014 y 2024, 16 provincias redujeron la participación de Educación y Cultura dentro del gasto total, lo que refleja una pérdida sostenida de prioridad presupuestaria. En regiones como el NOA y la Pampeana, la caída fue generalizada; en la Patagonia, solo Neuquén logró un incremento.
A su vez, el proyecto de Presupuesto 2026 prevé destinar apenas el 0,75% del PBI a educación, muy lejos de la meta legal del 6% fijada en la Ley de Educación Nacional. Esto equivaldría a un recorte que llevaría la inversión a niveles previos a 2010, mientras que el gasto público total proyectado para 2026 sería 57% inferior al de 2023 en términos reales.
Un informe de la Fundación Éforo advirtió que, para mantener el nivel real de 2023, el presupuesto debería aumentar cerca de 940%. Sin embargo, el proyecto oficial contempla una suba nominal del 411%, muy por debajo de lo necesario para sostener programas, infraestructura y salarios.
La posible derogación del artículo 9 de la Ley de Educación Nacional -que obliga al Estado a destinar un piso del 6% del PBI al sector- profundiza la preocupación de universidades y escuelas. Esta semana, docentes y no docentes realizaron nuevas jornadas de paro para exigir financiamiento y un aumento salarial urgente.
Mientras el Gobierno proyecta otro año de recortes, la educación argentina enfrenta una crisis que se profundiza y que, por ahora, no encuentra freno.