Crisis del consumo: el 46% de las compras en súper ya se paga con tarjeta de crédito

El uso de tarjetas de crédito para compras en supermercados crece sin freno: ya representa el 46% del total. Las promociones, las cuotas y la pérdida del poder adquisitivo empujan esta tendencia que refleja cómo las familias ajustan su economía cotidiana.

En medio de un consumo desigual, donde se disparan las ventas de autos y viajes al exterior, pero se estancan los bienes esenciales, crece una práctica cada vez más común: pagar con tarjeta de crédito los productos del supermercado.

Según un informe de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA, basado en datos del INDEC, el 46% de las compras en supermercados durante el primer semestre de 2025 se realizaron con tarjeta de crédito. Esto marca un aumento de 7 puntos en comparación con diciembre de 2023, cuando esa cifra era del 39%.

Mientras tanto, el uso de la tarjeta de débito cayó del 34% al 27% y el efectivo se redujo al 16%. ¿El motivo? Para muchos hogares, la tarjeta funciona como un salvavidas financiero mensual.

Financiar lo básico: la nueva normalidad

Desde alimentos hasta artículos de limpieza, lo que antes se pagaba al contado ahora se financia en cuotas. El informe del Centro RA de la UBA, coordinado por Mara Pegoraro, advierte que muchas familias están recurriendo al crédito para cubrir necesidades básicas, no lujos.

Esta tendencia ocurre en un contexto complicado: las ventas en supermercados, mayoristas y minoristas todavía no logran recuperar los niveles previos a la asunción de Javier Milei. Según el INDEC, a mayo de 2025 el consumo sigue 30% por debajo de diciembre de 2023.

Aunque algunas grandes cadenas minoristas mostraron un leve repunte, el panorama general sigue siendo de caída. Y el crédito aparece como un parche temporal para sostener el consumo.

Más tarjetas, más cuotas... y más deudas

Un informe de Payway confirmó que las operaciones con tarjeta de crédito crecieron un 10% interanual entre abril y junio de este año. Los pagos en un solo pago siguen siendo mayoría (58,3%), pero los planes en cuotas ganaron terreno: pasaron de representar el 29,1% al 34,8% en un año.

Pero este fenómeno no es gratis: también subió la mora. Según el Banco Central, en mayo la tasa de impago de las tarjetas llegó al 4,2%, un salto importante respecto al mes anterior y más del doble que hace un año.

Las razones detrás de este comportamiento son múltiples. Las promociones bancarias, los reintegros de hasta 40%, o la simple falta de efectivo en el momento de la compra hacen que muchas personas elijan la tarjeta como forma de "patear" gastos.

¿Una tendencia estable o pasajera?

Especialistas como Florencia Iragui (LCG) y Osvaldo del Río (Scentia) coinciden en que el boom de las tarjetas responde tanto a la necesidad como a las oportunidades temporales. Por ejemplo, en mayo el Hot Sale impulsó el uso del crédito gracias a las cuotas sin interés.

Sin embargo, en junio el consumo masivo volvió a caer: se contrajo 0,8% respecto al mes anterior y cerró el semestre con un avance marginal de 0,4%.

Para la UBA, lo preocupante no es solo el cambio en el método de pago, sino el descenso sostenido de las ventas. En resumen: las familias compran menos y lo que compran, lo financian.

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