Día de la Madre: las ventas volvieron a caer pese a descuentos y promociones
La pérdida del poder adquisitivo y el consumo contenido marcaron la celebración.
Las ventas por el Día de la Madre volvieron a mostrar un retroceso. Según datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), los comercios minoristas pymes registraron una caída del 3,5% en comparación con el mismo período de 2024, medida a precios constantes. Se trata del cuarto descenso interanual consecutivo en esta fecha, lo que confirma una tendencia de consumo cada vez más moderada.
Aunque el ticket promedio alcanzó los 37.124 pesos, con una suba nominal del 9,8% respecto al año anterior, la inflación erosionó el poder de compra, y en términos reales el gasto promedio cayó 16,7%.
A pesar de que más del 83% de los comercios ofreció promociones, cuotas sin interés y descuentos bancarios, la estrategia no alcanzó para revertir la caída del consumo efectivo.
El informe revela que las familias priorizaron compras más económicas y planificadas, eligiendo productos de menor valor. La celebración mantuvo cierta relevancia comercial, pero no logró ofrecer un repunte significativo frente al contexto general de caída del ingreso real.
En cuanto al desempeño de los rubros, el sector tecnológico fue el único que mostró una mejora en términos reales, con un crecimiento del 15,7%. El recambio de dispositivos y las opciones de financiación explican ese buen resultado. En el extremo opuesto, cosmética y perfumería lideró las caídas con una contracción del 24,2%, mientras que los electrodomésticos bajaron 8,4%, y la indumentaria retrocedió 5,3%. El rubro calzado y marroquinería se mantuvo estable, con una leve mejora del 1,8%.
Un 41,7% de los comercios dijo que las ventas estuvieron dentro de lo esperado, mientras que el 35% indicó que fueron menores, y solo el 23% reportó mejores resultados que sus previsiones. Estos datos reflejan un comportamiento cauteloso del consumidor, en un contexto económico que sigue limitando el gasto discrecional, incluso en fechas clave.
La CAME señala que la amplia adopción de estrategias promocionales permitió sostener algo de movimiento en ciertos rubros, pero sin traducirse en un aumento real del consumo. El resultado final refleja la persistente pérdida de poder adquisitivo y el freno del consumo masivo.