En una iniciativa conjunta con la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, la Cervecería y Maltería Quilmes puso en marcha una huerta agroecológica en su planta industrial de Acheral. El proyecto busca fortalecer el compromiso ambiental de la compañía y mejorar la calidad de vida de sus trabajadores mediante el cultivo de alimentos frescos para su comedor.

La propuesta nació a partir de una capacitación brindada por la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable del municipio capitalino. Durante la jornada, 30 empleados recibieron formación teórica y práctica en compostaje y armado de huertas, de la mano de la coordinadora Rocío Fernández.

"Queremos empoderar no solo al vecino, sino también a las organizaciones, para que composten y cultiven sus propios alimentos, en línea con la gestión ambiental que impulsamos desde el Municipio y la Provincia", destacó Fernández.

Una apuesta al trabajo conjunto por el ambiente

La jornada fue organizada a partir de una invitación del área de Medio Ambiente de Cervecería Quilmes, que avanza en políticas de sustentabilidad junto al sector público. "Trabajamos articuladamente con entidades privadas, como parte de la gestión de la intendenta Rossana Chahla y la secretaria Julieta Migliavacca", explicó Fernández.

La huerta se instalará al lado del comedor de la planta y servirá para complementar la alimentación diaria de los operarios. Además, se prevé una jornada familiar para que las familias de los trabajadores puedan participar del cierre y siembra final del proyecto.

Desde la cervecera, Cindy Lucena Leal -jefa de Higiene, Seguridad y Medio Ambiente- celebró la experiencia y la calificó como "completa, dinámica y didáctica". "Aprendimos que no se necesita un gran espacio para tener una huerta exitosa. Qué mejor que cosechar nuestros propios alimentos donde trabajamos", concluyó.