Aunque Brad Pitt es una de las figuras más reconocidas de Hollywood y siempre mostró un estado físico impecable, confesó en el podcast Armchair Expert con Dax Shepard que no siempre se cuidó como ahora. "Cuando era más joven, me despertaba, fumaba, tomaba cuatro gaseosas con hielo y no comía nada", contó el actor. Esa etapa estuvo marcada por una dieta cargada de azúcares que terminó afectando su salud.

Con el tiempo, y cuando su carrera comenzó a despegar, Brad decidió cambiar sus hábitos y se arrepiente de no haberlo hecho antes. Hoy intenta mantener un equilibrio: "Intento mantenerme en forma, comer sano y ser creativo", dijo. También contó que está tomándose un descanso autoinducido para cuidar su mente y cuerpo.

La clave está en la alimentación y el entrenamiento

Actualmente, Brad Pitt sigue una dieta basada en proteínas magras, grasas saludables y carbohidratos controlados. Tres alimentos son infaltables en su rutina diaria: pollo, brócoli y arroz integral. Además, acompaña esa dieta con un plan de entrenamiento personalizado, que trabaja grupos musculares diferentes cada día para mantener un cuerpo equilibrado y fuerte.

Un recuerdo especial de su paso por Argentina

En una entrevista con Telenoche (eltrece), Brad rememoró su estadía en Argentina en 1996, durante la filmación de Siete años en el Tíbet. Destacó la belleza del país y elogió especialmente la comida y el vino: "Comíamos como reyes".

Recordó su tiempo en un pequeño pueblo a los pies de Los Andes y en Mendoza, describiendo el paisaje como "mágico" y señalando el cambio constante del sol y el entorno. Además, emocionado, habló de un perro que adoptó en esa época llamado Blanco, que se parecía un poco a un galgo.