Ataque ruso a Ucrania deja seis muertos y provoca alerta nacional
Drones y misiles impactaron infraestructuras energéticas y zonas residenciales en la capital, Kiev.
Rusia lanzó un ataque masivo con drones y misiles sobre Ucrania, que afectó principalmente infraestructuras energéticas y zonas residenciales en Kiev, según informó el Ministerio de Energía ucraniano y la administración municipal. La ofensiva dejó seis muertos y al menos 10 heridos, incluyendo víctimas en los distritos de Sviatoshin, Dárnitsia, Pecherskyi y Dniprovskyi.
El alcalde de la capital, Vitali Klitschko, confirmó daños en edificios residenciales, entre ellos un bloque de 22 pisos afectado en varios niveles. En Dniprovskyi, un edificio de nueve plantas se incendió, dejando dos muertos, entre ellos una mujer de 86 años.
Periodistas locales reportaron múltiples explosiones nocturnas y residentes corriendo hacia refugios mientras sonaban las sirenas antiaéreas. La Fuerza Aérea ucraniana emitió alertas nacionales tras detectar despegues de bombarderos MiG-31 rusos.
Alerta en otras regiones y daños colaterales
Fuera de la capital, los ataques alcanzaron viviendas en la provincia de Kiev. En Bila Tserkva, cuatro casas fueron destruidas y un joven de 14 años resultó herido. También se reportaron actividades militares con drones y misiles en las provincias de Zaporizhia y Kharkiv.
Durante el amanecer, se activó nuevamente la alerta aérea ante posibles misiles hipersónicos Kinzhal dirigidos hacia Kiev. Klitschko indicó que un edificio no residencial en Sviatoshynskyi resultó dañado y podrían haber personas atrapadas bajo los escombros.
Contexto internacional: negociaciones de paz bajo presión
El ataque se produjo mientras Ucrania, Estados Unidos y países europeos revisaban un plan de paz propuesto por Washington en Ginebra. El borrador original, criticado por exigir concesiones de territorio y reducción del ejército ucraniano, fue modificado para respetar "plenamente la soberanía de Ucrania".
El canciller alemán, Friedrich Merz, advirtió que alcanzar un acuerdo antes del 27 de noviembre sería un "proceso largo y duradero". Funcionarios de la Casa Blanca negaron acusaciones de favorecer a Rusia y aseguraron que la administración estadounidense colabora de manera equilibrada con ambos bandos.
Los ataques nocturnos y la presión internacional marcan un escenario de tensión máxima, mientras la coalición internacional evalúa la situación y Ucrania enfrenta la necesidad urgente de proteger a su población y mantener la infraestructura crítica.