YPF canceló la planta de GNL en Río Negro: la reemplazará con buques regasificadores
La petrolera estatal modificó la estrategia de infraestructura para el proyecto Argentina GNL. Aunque se reduce la demanda de mano de obra, se mantiene la inversión y el volumen de exportación desde Río Negro.
YPF tomó una decisión clave para el futuro energético del país: canceló la construcción de la planta de GNL (Gas Natural Licuado) proyectada en la provincia de Río Negro y la reemplazará por buques regasificadores que operarán en el Golfo San Matías. Según explicaron fuentes de la empresa, la modificación no altera el corazón del proyecto Argentina GNL, que busca posicionar a la Argentina como un exportador relevante de gas natural.
"El proyecto no cambia en el fondo", afirmaron desde la petrolera a TN, y agregaron: "Nadie se pierde esa inversión". En ese sentido, confirmaron que si bien habrá "menos mano de obra" en comparación con lo que implicaba levantar una planta en tierra, de todos modos será necesario construir espigones para los barcos y tres gasoductos para conectar la producción desde Vaca Muerta.
La empresa explicó que se mantiene el objetivo de producir 28 millones de toneladas de GNL para 2031, aunque la infraestructura se adaptará a una modalidad off shore, con buques que funcionarán como plantas flotantes. "La inversión es más o menos la misma. Se va a seguir haciendo en Río Negro", detallaron.
Desde el gobierno de Río Negro respaldaron la decisión y remarcaron que la modalidad no altera el impacto económico en la provincia. "La decisión de operativizar la exportación con barcos fábrica no modifica en absoluto la cantidad de toneladas de GNL previstas", señalaron. Además, aclararon que el valor agregado al producto y los beneficios fiscales seguirán siendo los mismos, independientemente de si la planta está en tierra o en el mar.
También insistieron en que "ninguno de los términos de los acuerdos alcanzados se modifica" y revelaron que, desde el comienzo, se consideró el uso de un barco licuefactor como primera etapa. "Con la decisión conocida hoy, se aceleran los tiempos para alcanzar los máximos volúmenes exportables", sostuvieron desde la administración provincial.
La medida, sin embargo, tuvo repercusiones en el plano laboral. Desde la UOCRA de Neuquén advirtieron que la planta de GNL hubiera implicado una obra de cinco años, con un alto impacto en empleo calificado. "Ahora los caños van a ser más rápidos, pero la planta generaba un derrame importante en la región", dijeron. Indicaron también que ya se construyó el primer tramo del oleoducto que conecta con la planta de Allen, y que ese proyecto tomará relevancia tras el cambio de estrategia.
A nivel nacional, el titular de la UOCRA, Gerardo Martínez, expresó preocupación por el impacto en el sector de la construcción. "En este momento reina la incertidumbre. Semana a semana se avanza y se retrocede", afirmó. "Esta decisión baja el volumen de contrato para nosotros", agregó.
La iniciativa de construir una planta de GNL había tenido su origen en Bahía Blanca, en la provincia de Buenos Aires, pero diferencias políticas entre el gobernador Axel Kicillof y el presidente Javier Milei forzaron un cambio de rumbo. En ese contexto, el intendente de Bahía Blanca, Federico Susbielles, recordó sus declaraciones de julio pasado: "El tiempo dirá si esto es un daño para Bahía o para todos los argentinos". Este jueves, tras conocerse la decisión, publicó en su cuenta de X: "El tiempo dijo".
En los últimos meses, el presidente de YPF, Horacio Marín, había defendido la continuidad del proyecto Argentina GNL aún sin la participación de la petrolera malaya Petronas, quien originalmente estaba asociada a la inversión. "Si Petronas no continúa, YPF va a seguir adelante", aseguró. "Hay mucho interés en el mundo por el proyecto. Nosotros vinimos a YPF para acelerarlo con el objetivo de que el país pueda exportar unos 15.000 millones de dólares en 2030 solo de gas", añadió.