Yerba Buena se prepara para debatir un nuevo Código Urbanístico
El Concejo Deliberante analiza un proyecto que busca ordenar el crecimiento de la ciudad hasta 2050, con foco en vivienda, conectividad y preservación patrimonial.
El crecimiento urbano de Yerba Buena podría dar un giro decisivo en las próximas semanas. El Concejo Deliberante inició el análisis de un ambicioso proyecto de ordenanza que propone la implementación de un nuevo Código de Planeamiento Urbano, diseñado para ordenar el desarrollo de la ciudad durante los próximos 25 años.
La iniciativa, elaborada por el Departamento Ejecutivo Municipal (DEM) y encabezada por el intendente Pablo Macchiarola, apunta a reemplazar la normativa vigente desde 1994. Desde el oficialismo anticipan que el tratamiento podría concretarse en una sesión especial dentro de los próximos 30 días. "La ciudad cambió radicalmente en estos 30 años. Ya no es una ciudad dormitorio. Hoy necesita reglas claras, modernas y adaptadas a su nueva fisonomía", señaló Franco Marigliano, presidente de la Comisión de Obras Públicas del Concejo.
Un plan pensado para una ciudad en transformación
El borrador del nuevo Código es fruto de casi dos años de trabajo técnico, con talleres participativos, aportes institucionales y consulta a vecinos. La arquitecta Isabel Salas lideró el proceso, que culminó en un documento de casi 200 páginas, enfocado en cinco ejes: densidad poblacional, conectividad, desarrollo inmobiliario, accesibilidad y protección patrimonial.
Uno de los desafíos centrales es revertir el déficit habitacional. Según el secretario de Planificación y Obras Públicas, Esteban Auad, las normativas actuales imponen restricciones que desincentivan la construcción de viviendas y promueven un crecimiento comercial desordenado.
El nuevo Código propone orientar el crecimiento hacia el norte, especialmente en la zona de avenida Perón, donde aún hay grandes extensiones rurales. El objetivo es evitar que la expansión privada siga replicando el modelo de barrios cerrados, que "fragmentaron la ciudad y bloquearon la apertura de calles".
Protección patrimonial y flexibilidad normativa
Una de las novedades centrales es la creación de dos Áreas de Protección Patrimonial (APP). La APP1 comprenderá la Villa Marcos Paz, el casco fundacional de Yerba Buena, creado en 1906, que será resguardado por su valor histórico, ambiental y paisajístico. También se prevé la ampliación de esa área para proteger otras zonas con características similares.
Además, el Código introduce un mecanismo de revisión quinquenal para adaptarse al dinamismo urbano. No busca resolver todos los problemas estructurales de la ciudad, pero sí establecer una base legal moderna y flexible que reemplace a la norma vigente, considerada obsoleta. "No podemos seguir estancados en una norma pensada para otra realidad. Las ciudades evolucionan, y nosotros tenemos que planificar esa evolución", sostuvo Auad.
Yerba Buena se encuentra ante una decisión clave: pasar de una expansión desorganizada a un desarrollo planificado y con identidad. El debate que se dará en el Concejo Deliberante no solo definirá el marco normativo de la ciudad para las próximas décadas, sino que marcará el rumbo de su crecimiento, su integración y su sostenibilidad ambiental.