Ventas pyme en picada: noviembre cerró con fuerte caída y alertas en casi todos los rubros
Las ventas minoristas bajaron 4,1% interanual y 9,1% mensual. Perfumería, bazar y alimentos fueron los sectores más golpeados, aunque el comercio mantiene expectativas positivas para 2025.
Las ventas minoristas de las pymes registraron en noviembre una nueva baja: cayeron 4,1% interanual y 9,1% respecto de octubre, según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). La retracción alcanzó a casi todos los rubros, confirmando un escenario donde los hogares priorizan productos esenciales y postergan consumos no indispensables.
Aun así, las pymes suman en el balance anual un crecimiento del 3,4%. Más de la mitad de los comercios consultados (54,2%) considera que su situación se mantiene estable frente al año pasado, aunque un 37% percibió un deterioro.
De cara al próximo año, el sector muestra optimismo: casi el 49% espera una mejora.
Los rubros más golpeados por la caída del consumo
Seis de los siete rubros relevados por CAME tuvieron bajas interanuales. Las más fuertes fueron:
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Perfumería: -17%
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Bazar y decoración: -9,7%
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Alimentos y bebidas: -5,9%
La única excepción fue Farmacia, que creció 1,8%.
En perfumería, la inflación acelerada y la estacionalidad pos Día de la Madre provocaron una fuerte caída mensual del 14,6%. El sector también advierte sobre un mercado cada vez más desigual por la desregulación del ingreso de productos importados.
En bazar y decoración, el financiamiento caro y la falta de cuotas sin interés paralizaron compras de mayor valor. Muchos comercios adelantaron liquidaciones y estrategias navideñas para intentar reactivar las ventas.
En alimentos y bebidas, la inflación en la canasta básica y la pérdida de poder adquisitivo siguieron empujando a los consumidores hacia segundas marcas y compras estrictamente esenciales.
Expectativas, inversión y lo que se espera para diciembre
Aunque noviembre fue un mes flojo, el 48,6% de las pymes espera un 2025 con mejores condiciones. CAME habla de un "consumo dual": por un lado, la gente ajusta el gasto; por otro, el comercio se mantiene esperanzado en un reordenamiento económico que impulse la demanda interna.
En materia de inversión, el clima sigue complicado: el 60% considera que hoy no es un buen momento para apostar capital, mientras que apenas el 14,6% cree lo contrario.
Para diciembre, los comerciantes ponen fichas en la temporada festiva y en la demanda navideña, que podría amortiguar la caída acumulada del año.