Cada vez más argentinos no pueden pagar la tarjeta de crédito: la morosidad se dispara

Según datos oficiales, el 4,9% de los créditos al consumo está en mora. Las familias sufren el impacto de la crisis y las tasas elevadas.

Los datos del Banco Central confirman un escenario preocupante para miles de argentinos: el pago de las tarjetas de crédito y préstamos personales se vuelve cada vez más difícil. En mayo, la morosidad en el crédito destinado a los hogares alcanzó el 4,5%, mientras que en el caso de las líneas vinculadas al consumo trepó al 4,9%.

El ratio de irregularidad total del crédito al sector privado subió al 2,6%, reflejando el impacto de la crisis económica tanto en las familias como en las empresas.

Más cheques rechazados y previsiones en baja

Otro indicador preocupante es el aumento de los cheques rechazados por falta de fondos. En mayo, alcanzaron el 1,39% en cantidad y el 1,24% en montos, con subas mensuales e interanuales.

Aunque el sistema financiero aún mantiene un alto nivel de previsiones para cubrir la incobrabilidad, estas cayeron 12 puntos con respecto a abril. Así, se profundiza la desconfianza sobre la capacidad de pago de los usuarios en un contexto de ingresos deteriorados y tasas altísimas.

Esta nota habla de:
Últimas noticias de tarjetas de crédito
La mora en tarjetas de crédito se disparó un 252% en un año y preocupa a las familias
Actualidad

La mora en tarjetas de crédito se disparó un 252% en un año y preocupa a las familias

El último informe del Banco Central revela un aumento histórico de la morosidad en préstamos personales y tarjetas de crédito. Las familias enfrentan serias dificultades para sostener sus pagos mientras el financiamiento se estanca.
Crisis del consumo: el 46% de las compras en súper ya se paga con tarjeta de crédito
Actualidad

Crisis del consumo: el 46% de las compras en súper ya se paga con tarjeta de crédito

El uso de tarjetas de crédito para compras en supermercados crece sin freno: ya representa el 46% del total. Las promociones, las cuotas y la pérdida del poder adquisitivo empujan esta tendencia que refleja cómo las familias ajustan su economía cotidiana.
Nuestras recomendaciones