Servicio de rampa: cómo funciona el nuevo sistema y qué actores podrían ingresar al negocio
La desregulación del servicio de rampas, anunciada por el Gobierno de Javier Milei, abre nuevas oportunidades para empresas aéreas y no aéreas en el sector del handling.
El reciente conflicto gremial con Intercargo, que causó paros, cancelaciones de vuelos y pasajeros atrapados por horas, marcó un hito en el sector aerocomercial argentino. En un esfuerzo por deshacer el protagonismo de Intercargo, el Gobierno de Javier Milei anunció una desregulación del servicio de rampas en los aeropuertos del país.
El servicio de rampa, conocido internacionalmente como handling, es una actividad clave en la operación de vuelos: incluye la carga y descarga de equipaje, el abastecimiento de combustible y otros servicios esenciales para la operativa diaria de las aeronaves. Esta medida, según explicó el portavoz presidencial Manuel Adorni, busca terminar con "el terrorismo sindical" y abrir el sector a nuevos competidores.
¿Cómo funciona la desregulación del servicio de rampas?
Según el anuncio, la desregulación permitirá que cualquier empresa, sin necesidad de ser una aerolínea, pueda ofrecer servicios de rampa en los aeropuertos, siempre y cuando cuente con la autorización de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). Esta medida incluye una tarifa desregulada, lo que significa que las aerolíneas y las empresas prestadoras podrán negociar el precio directamente, sin estar atadas a una estructura de costos fija.
Además, se estipula que las licitaciones para ofrecer este servicio serán por períodos de 15 años, y en caso de que haya más empresas interesadas que espacios disponibles en los aeropuertos, la autoridad de aplicación definirá el método de asignación.
El Gobierno también habilitó la posibilidad de que las propias aerolíneas se autopresten el servicio, como ya lo hace Flybondi en la mayoría de los aeropuertos donde opera.
El ministro de Desregulación del Estado, Federico Sturzenegger, justificó la medida señalando que la desregulación de los precios de los viajes aéreos, iniciada hace un año, forma parte de un proceso más amplio de apertura del sector.
Oportunidades para nuevas empresas y actores internacionales
Empresas como Flybondi ya cuentan con la autorización de la ANAC para ofrecer servicios de rampa a terceros. La low-cost argentina fue una de las primeras en avanzar en este modelo, gestionando su propio servicio en el 80% de los aeropuertos locales donde opera. Ahora, con la nueva normativa, Flybondi planea expandir sus operaciones en Aeroparque y ofrecer este servicio a otras aerolíneas nacionales e internacionales.
Otras aerolíneas como Aerolíneas Argentinas también podrían sumarse a esta nueva dinámica. La compañía nacional ya cuenta con su propia marca de handling, Aerohandling, y evalúa la posibilidad de ofrecer estos servicios a competidores. Asimismo, actores internacionales como American Airlines, a través de su filial Argentina Ground Support (AGS), ya realizan operaciones de rampas en Argentina, exentos de los conflictos gremiales que afectan a otras aerolíneas.