La Justicia de Tucumán investiga un nuevo caso de maltrato animal relacionado con una práctica clandestina conocida como "La Chiguada". Dos caballos fueron sometidos a una brutal competencia de fuerza en el barrio Alejandro Heredia, en la que fueron forzados a arrastrar carros en direcciones opuestas. Este cruel desafío, presenciado por más de 30 personas, terminó cuando uno de los caballos cayó al suelo, siendo arrastrado por el otro.

La violenta Prueba de Fuerza y la conexión con Apuestas Clandestinas

Según la investigación realizada por la Unidad Fiscal de Decisión Temprana (UFDT), el incidente ocurrió el 18 de noviembre de 2024 y fue grabado en dos videos que se viralizaron en las redes sociales. Los videos muestran a los caballos forzados a competir en lo que parece ser una prueba de resistencia física, en la que los animales eran azuzados por dos hombres para que tiraran con fuerza. Esta práctica estaría vinculada a apuestas de dinero, en una actividad ilegal que se repite los fines de semana en el barrio.

Acciones Judiciales y Rescate de los Caballos

El fiscal Daniel Sosa Piñero, a cargo de la investigación, ha solicitado el rescate de los animales involucrados. Tras las pruebas obtenidas, como los testimonios de testigos y las imágenes grabadas, se autorizó el rescate de tres caballos que se encontraban en condiciones precarias. Estos animales fueron entregados a la Fundación Matías, que se encargará de su cuidado y recuperación, proporcionando atención veterinaria y la alimentación adecuada para su rehabilitación.

El Maltrato Animal en la "Chiguada" y su Impacto

"La Chiguada" es una práctica ilegal que no solo pone en peligro la integridad física de los caballos, sino también su bienestar emocional. Este tipo de competencias, similar a las peleas de gallos o de perros, está prohibido por la Ley Nacional 14.346 de Protección Animal, que sanciona cualquier acto de crueldad hacia los animales. Los caballos sometidos a esta prueba de fuerza pueden sufrir lesiones graves e incluso la muerte, debido a la presión física a la que son sometidos.

El caso causó indignación en la comunidad tucumana y ha puesto en evidencia la existencia de apuestas clandestinas vinculadas al maltrato animal. La UFDT sigue investigando los hechos, con el objetivo de identificar a los responsables y sancionarlos conforme a la ley. La denuncia pública de este tipo de prácticas es crucial para sensibilizar a la sociedad y evitar futuros casos de crueldad animal.