Caen los préstamos en pesos y el uso de tarjetas de crédito se frenó en noviembre
Tras el impulso por el Día de la Madre, el crédito al consumo volvió a retroceder en noviembre.
El uso de tarjetas de crédito perdió impulso en noviembre y arrastró al crédito en pesos del sector privado, que retrocedió 0,4% en términos reales, según estimaciones de la consultora LCG basadas en una inflación mensual proyectada del 2,3%.
La baja se explica principalmente por el freno del financiamiento al consumo, que cayó 1,2% mensual real, revirtiendo la mejora de octubre. Dentro de esa categoría, los préstamos personales bajaron 0,7% y las tarjetas de crédito mostraron un descenso más marcado, del 1,7%.
El reporte de LCG señaló que el crédito al consumo, tras 17 meses de crecimiento consecutivo, atraviesa un período de estancamiento y movimientos erráticos.
Desde First Capital Group, Guillermo Barbero atribuyó la caída en los préstamos personales al aumento de la morosidad, que frenó la oferta de crédito y ralentizó la baja de tasas. Pese al retroceso mensual, los préstamos al consumo crecieron 38,4% interanual, impulsados por un fuerte salto del 63,5% en los créditos personales.
El financiamiento a empresas también mostró una contracción leve, del 0,1%, producto de la caída del financiamiento vía documentos, mientras que los adelantos crecieron 3,3%.
Hipotecarios y prendarios se desaceleran y marcan su peor mes del año
Las líneas de crédito con garantía real crecieron 1,8% sobre la inflación, pero no alcanzaron para compensar el retroceso general del crédito al sector privado. Según LCG, estas líneas habían mantenido un promedio de crecimiento real mensual del 6,7% en los últimos diez meses, pero en noviembre mostraron una clara desaceleración.
Los hipotecarios crecieron 5,2% en el mes, mientras que los prendarios cayeron 1,6% tras 18 meses consecutivos de aumento.
El economista Federico González Rouco advirtió que los hipotecarios UVA, principalmente destinados a familias, tuvieron su peor mes del año: el stock nominal cayó 50%, hasta los US$180 millones, quedando en el mismo nivel que un año atrás. Señaló que la volatilidad de septiembre y octubre adelantó operaciones, reduciendo ahora la cantidad de transacciones.