Paro total en Tierra del Fuego contra la baja de aranceles a electrónicos importados
La UOM encabeza la protesta que afecta fábricas, transporte, escuelas y oficinas públicas en toda la provincia.
Tierra del Fuego amaneció paralizada este miércoles por un paro general de 24 horas convocado por sindicatos, con fuerte adhesión de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), en rechazo a la decisión del Gobierno nacional de reducir aranceles e impuestos a productos electrónicos importados. La medida impacta directamente en el régimen de promoción industrial que sostiene la producción local de celulares, televisores y aires acondicionados.
Fábricas paralizadas y gremios en pie de guerra
Desde la semana pasada, fábricas emblemáticas como Newsan, Mirgor, BGH y Radio Victoria frenaron la producción en Río Grande y Ushuaia. La Cámara Afarte advirtió que la industria quedó en desventaja frente a productos importados, tras la baja escalonada de aranceles del 16% al 0% y la reducción de impuestos internos que favorecen a los equipos extranjeros.
En 2024, Tierra del Fuego produjo más de 5,5 millones de celulares, lo que da dimensión del peso de este sector en la economía local. Empresas como Newsan y Mirgor concentran más del 87% del mercado.
Adhesión de docentes, estatales y Camioneros
La protesta tuvo respaldo de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), gremios docentes y el sindicato de Camioneros, que interrumpió el transporte de carga bajo la consigna "en defensa de la soberanía nacional". También se sumaron organizaciones sociales y políticas.
Fuerte respaldo político en la provincia
El secretario general de la UOM Río Grande, Oscar Martínez, cuestionó al ministro Federico Sturzenegger por sugerir transformar la isla en un parque de atracciones. "Vamos a defender cada puesto de trabajo", aseguró.
El gobernador Gustavo Melella advirtió que la medida pone en riesgo miles de empleos, mientras que el intendente de Río Grande, Martín Perez, denunció que buscan "desmantelar" el régimen de promoción industrial. La senadora nacional Cristina López calificó la baja de aranceles como "un golpe mortal contra la industria" y dijo que responde "a las exigencias del FMI".