La causa por el robo del celular del gobernador Osvaldo Jaldo suma un nuevo capítulo: Liliana "Pampita" Carrizo, única detenida hasta ahora, declaró ante el fiscal y aseguró que el fotógrafo Héctor Juárez, quien aportó la imagen clave para identificarla, fue quien le entregó el teléfono. El testimonio complica aún más la investigación, que podría estar frente a un hecho planificado y con más involucrados.

El hurto ocurrió el pasado 18 de junio en un acto político en La Cocha. El celular del gobernador desapareció en plena actividad pública y una imagen tomada por Juárez habría mostrado a Carrizo con la mano dentro del saco de Jaldo. Sin embargo, ahora la detenida niega ser la autora del hecho y señala al propio fotógrafo como partícipe directo.

Rechazo al arresto domiciliario y nuevos datos clave

La defensa de Carrizo pidió arresto domiciliario alegando que está embarazada y a cargo de sus dos hijas menores. Pero la Justicia lo rechazó. La fiscalía advirtió que en su vivienda no hay condiciones técnicas para el uso de pulsera electrónica, y que existe riesgo de entorpecimiento de la investigación.

Además, nuevas pruebas complican la situación: se descubrió que alguien usó el celular de Jaldo para tomar una foto de Carrizo, lo que pone en duda su participación directa en el robo. La querella también insistió en que el hecho podría tener motivaciones políticas o económicas, por lo que se profundiza el análisis de cámaras y celulares secuestrados.

La abogada Emilia Ale, nueva defensora de Carrizo, remarcó que su clienta está protegida por la presunción de inocencia y que cualquier declaración que haya dado está ahora en manos del fiscal. "