El Gobierno prepara una nueva denuncia contra el "Señor del Tabaco" por presunto lavado
ARCA detectó operaciones irregulares de Tabacalera Sarandí en 2024 que replicarían un esquema de años anteriores. Desde la empresa niegan irregularidades y aseguran que Otero ya fue sobreseído.
La Agencia Federal de Ingresos Públicos (ARCA) prepara nuevas acciones judiciales contra Pablo Otero, dueño de Tabacalera Sarandí y conocido como el "Señor del Tabaco", por presunto lavado de dinero. La investigación apunta a operaciones de 2024 con clientes falsos y empresas distribuidoras sin capacidad económica real, replicando un esquema observado entre 2021 y 2023.
Según el organismo, Tabacalera Sarandí habría recibido más de 33.600 millones de pesos de 23 distribuidoras que, para ARCA, carecían de solvencia y actividad real, simulando operaciones comerciales para encubrir el origen de los fondos.
Negativa de la tabacalera y antecedentes judiciales
Desde Tabacalera Sarandí negaron irregularidades, asegurando que el uso de efectivo es habitual en la industria del tabaco y que las pruebas son insuficientes. Además, Pablo Otero ya había sido sobreseído tras la desestimación inicial de la denuncia por parte del fiscal Eduardo Taiano y de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal.
A pesar del sobreseimiento, fuentes judiciales indican que ARCA prepara una nueva presentación con pruebas adicionales que involucran operaciones del año 2024 con otras distribuidoras.
Deuda millonaria y causas en curso
El conflicto con el Estado incluye además el pago de impuestos internos. En agosto, la Corte Suprema confirmó la constitucionalidad del tributo y dejó firme la deuda de Tabacalera Sarandí, que asciende a $419.398 millones, incluyendo capital e intereses.
Paralelamente, sigue abierta una causa penal en Mar del Plata por presunta falsificación de estampillas fiscales y venta de cigarrillos con documentación apócrifa, iniciada en 2019. Las marcas de la empresa, entre ellas Red Point, West, Kiel y Master, ganaron cuota de mercado mientras Otero utilizaba estrategias judiciales para retrasar pagos al fisco.