Aunque la economía argentina comienza a dar señales de recuperación y la inflación se desacelera, el alivio no alcanza a todos por igual. Un informe de la consultora Moiguer reveló una creciente brecha entre dos Argentinas: una "pesificada", que lucha por sobrevivir, y otra "dolarizada", que aprovecha un dólar barato para gastar fuera del país.

Los datos que muestran la desigualdad

El 50% de los hogares afirma que no llega a fin de mes, y un 30% debe resignar gastos para poder pagar los servicios básicos. Al mismo tiempo, un 23% compra dólares regularmente y un 11% realiza compras en el exterior, lo que demuestra una profunda segmentación económica.

Ingresos por clase: una pirámide desequilibrada

• Clase baja (50%): 19% con ingresos hasta $585.800 y 31% hasta $1.120.600.

• Clase media (44%): 26% gana hasta $1.564.000 y 18% hasta $3.122.836.

• Clase alta (6%): ingresos entre $9.105.000 y $20.500.000.

Un país, dos formas de consumir

Mientras los sectores más acomodados gastan en viajes y atesoran divisas, los sectores bajos dependen de descuentos y promociones para sobrevivir. Las estrategias comerciales se adaptan a estos dos mundos: desde paquetes turísticos hacia el exterior hasta ofertas agresivas en alimentos y servicios básicos.