La industria nacional registró en mayo una suba del 6% respecto al mismo mes del año pasado, según el último informe de actividad de la Unión Industrial Argentina (UIA). Si bien el ritmo fue menor al de abril -cuando el crecimiento fue del 8,5%-, los niveles se mantuvieron estables mes a mes, lo que muestra una señal de resistencia en un contexto aún desafiante.

Entre los motores de este repunte se destacaron la mayor liquidación de divisas del agro, el buen desempeño de la industria automotriz y un fuerte salto en el patentamiento de maquinaria.

Autos, maquinaria y agro: los sectores que empujan

El detalle por rubros muestra un desempeño dispar, pero algunos sectores mostraron señales claras de recuperación. La producción automotriz creció un 25% interanual, mientras que el patentamiento de maquinaria industrial se disparó un 60%, reflejo de una mayor inversión en bienes de capital.

En paralelo, el sector agroindustrial también aportó lo suyo: la liquidación de divisas asociadas a la molienda y otras actividades vinculadas al agro creció un 17%. A esto se suma un fuerte incremento de las importaciones desde Brasil (+55%), sobre todo por la compra de maquinaria agrícola y autos. En cambio, las exportaciones hacia el mismo destino crecieron apenas un 4%, lastradas por una baja en productos agroindustriales, combustibles y energía.

Un repunte con límites: todavía 9,7% por debajo del 2023

Más allá de las señales positivas, el balance general del año sigue mostrando retrocesos respecto de 2023. En el acumulado de los primeros cinco meses, la industria creció un 6,7%, pero todavía se ubica un 9,7% por debajo del mismo período del año pasado.

Un dato que grafica esa fragilidad es el consumo de energía eléctrica por parte de los Grandes Usuarios Industriales (GUI), que si bien se mantuvo prácticamente sin cambios respecto de abril (+0,6%), sigue en niveles históricamente bajos para un mes de mayo.