El proceso judicial por la muerte de Diego Maradona avanza con una etapa crucial: la autopsia. Este martes, el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro escuchará a los peritos que realizaron los estudios complementarios sobre el cuerpo del astro del fútbol, una instancia clave para determinar el rol de los siete profesionales de la salud imputados en la causa.

Luego de que la semana pasada declarara el médico forense que examinó el cuerpo de Maradona el 25 de noviembre de 2020, ahora será el turno de los especialistas que realizaron los estudios histopatológicos y toxicológicos. Estos análisis serán fundamentales para esclarecer las circunstancias en las que falleció el Diez y determinar si hubo negligencia médica.

El informe toxicológico descarta la presencia de alcohol y drogas en su organismo, pero detectó varios medicamentos: venlafaxina (antidepresivo), quetiapina (antipsicótico), levetiracetam (antiepiléptico) y naltrexona (para tratar adicciones). Además, se encontraron rastros de metoclopramida y ranitidina, usados para tratar problemas digestivos.

Un cuadro médico crítico y falta de atención

El equipo de forenses de la morgue de San Fernando determinó que Maradona falleció por una insuficiencia cardíaca que le provocó un edema pulmonar agudo y derivó en muerte súbita mientras se encontraba bajo internación domiciliaria en Tigre.

Los fiscales Patricio Ferrari y Cosme Iribarren han puesto el foco en las condiciones en las que estaba el exfutbolista: una casa inapropiada para su estado físico, falta de atención médica adecuada y una ausencia de monitoreo que, según los testimonios, permitió que Maradona agonizara sin que nadie lo advirtiera a tiempo.

"Por los datos que tuvimos, él no habría tenido controles desde las 00:30 del 25 de noviembre", declaró Carlos Mauricio Cassinelli, uno de los forenses que realizó la autopsia. Además, destacó que sus órganos presentaban un exceso de líquido, un factor que pudo haber desencadenado el paro cardíaco.

La acusación y la defensa

Para la Fiscalía y los abogados querellantes, las pruebas refuerzan la teoría de que Maradona fue abandonado a su suerte. Se señala que la casa de internación no estaba equipada para emergencias y que no había instrumentos médicos básicos para reanimarlo.

Por otro lado, los abogados defensores de los siete imputados aseguran que hasta el momento no hay elementos que incriminen directamente a sus clientes. En el banquillo de los acusados están la psiquiatra Agustina Cosachov, el neurocirujano Leopoldo Luque, el psicólogo Carlos Díaz, el enfermero Ricardo Omar Almirón, el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna, la coordinadora médica Nancy Forlini y el jefe de enfermería Mariano Perroni, todos acusados de homicidio simple con dolo eventual.