Juicio por el femicidio de Catalina: el gesto del acusado que generó indignación
El asesinato que conmovió a Córdoba, ocurrió el 17 de julio de 2024.
El 6 de marzo de 2025, arrancó el juicio contra Néstor Soto, de 22 años, acusado de asesinar a la joven Catalina Gutiérrez. Este crimen, que conmovió a Córdoba, ocurrió el 17 de julio de 2024. La joven estudiante de arquitectura fue brutalmente asesinada, y Soto es el único imputado por el hecho, que está siendo juzgado como homicidio agravado por alevosía y violencia de género.
Durante la primera audiencia, se registró un momento de gran conmoción: Soto sonrió junto a su abogada, Ángela Burgos Niño, en la misma sala donde se encontraban los padres, la hermana y otros familiares de la víctima. Este gesto fue presenciado por los seres queridos de Catalina, quienes no ocultaron su indignación ante tal actitud.
El repudiable gesto de Soto frente a los padres de Catalina
El incidente ocurrió luego de un cuarto intermedio en la sala de la Cámara Undécima del Crimen de Córdoba. En la reanudación del juicio, mientras todos regresaban a la sala, Soto, en compañía de su abogada, mostró una sonrisa a pocos metros de los familiares de la víctima. La situación fue tan desconcertante que incluso la abuela del acusado, que se encontraba en la audiencia, defendió a su nieto, aunque luego se sentó nuevamente.
Este gesto de indiferencia ante el dolor de la familia de Catalina causó una gran indignación. El padre de la joven, que estaba presente, recordó cómo Soto había intentado mostrarse "inocente" antes de que la verdad saliera a la luz. Los presentes en la sala no pudieron evitar expresar su repudio.
El impactante relato del femicidio de Catalina Gutiérrez
La noche del 17 de julio de 2024, Catalina Gutiérrez, de 21 años, desapareció de su hogar en el barrio Inaudi, en Córdoba. Según las investigaciones, la joven había salido de su casa alrededor de las 21:00 y poco después dejó de contestar los mensajes a su familia.
En ese momento, Catalina se dirigía al departamento de Soto, quien la había invitado para ir juntos a una reunión con amigos en el shopping Patio Olmos. Sin embargo, en el departamento del acusado se habría desatado una discusión, seguida de un forcejeo en el que, según los investigadores, Soto estranguló a Catalina.
Cerca de las 22:20, un video mostró a Soto conduciendo el Renault Clio por la avenida Valparaíso, con Catalina ya inconsciente o posiblemente muerta. Más tarde, abandonó el auto en un barrio alejado, donde intentó prenderle fuego para borrar cualquier evidencia del crimen. La policía, siguiendo el rastreo del celular de la víctima, localizó el vehículo y halló el cuerpo sin vida de Catalina en el asiento trasero.
La familia de la joven, alertada por los mensajes y el rastreo, encontró el lugar donde se encontraba el auto. El padre de Catalina recordó el momento en que Soto, al verlos llegar, los abrazó de forma extraña, como si se hiciera el sorprendido ante el hallazgo de su cuerpo. Fue en ese instante cuando la madre comenzó a sospechar de él.