Gracias a investigaciones del CONICET, el Kéfir ingresó al Código Alimentario Argentino
El kéfir de agua, una bebida fermentada con beneficios probióticos, ha sido incorporado oficialmente al Código Alimentario Argentino,
El kéfir, una bebida fermentada con siglos de historia en los pueblos del Cáucaso, dio un paso importante en Argentina al ser oficialmente incluida en el Código Alimentario Argentino (CAA) marcando un avance significativo para la salud pública y la regulación de productos probióticos en el país.
Este logro se debe a las investigaciones realizadas por científicos del Conicet y universidades nacionales.
Esto garantiza que el kéfir de agua, conocido por sus beneficios para la salud intestinal, cumple con los estándares de calidad y seguridad necesarios para su consumo.
Gabriel Vinderola, destacado investigador del Conicet, lideró un estudio exhaustivo en el que se analizaron muestras de kéfir de agua producidas en Argentina. Los resultados confirmaron que todas las muestras cumplían con los requisitos de calidad establecidos, incluidos los niveles adecuados de bacterias lácticas y levaduras, así como el pH y contenido de alcohol.
Beneficios
El kéfir es una bebida fermentada que se puede elaborar tanto con leche como con agua. A través de un proceso de fermentación natural con gránulos de levaduras y bacterias, el kéfir ofrece numerosos beneficios para la salud. Entre ellos, destaca su capacidad para mejorar las funciones digestivas y equilibrar la flora intestinal.
En su versión con agua, el kéfir se convirtió en una alternativa popular para aquellos que buscan beneficios probióticos sin consumir lactosa.
Nódulos de Kéfir.
Florencia Spagarino, health coach y experta en nutrición, subraya que el kéfir de agua proporciona una variedad de bacterias beneficiosas que pueden ayudar a prevenir enfermedades y trastornos inflamatorios intestinales.
Proceso de elaboración
La preparación del kéfir de agua es simple y requiere ingredientes básicos. Se colocan los nódulos de kéfir en agua azucarada con frutas deshidratadas, las cuales alimentan las bacterias y levaduras durante la fermentación. Después de 48 horas, el líquido se transfiere a una botella cerrada y se deja fermentar por otras 24 horas, resultando en una bebida burbujeante similar a una gaseosa natural.
Expansión en el Mercado Argentino
La inclusión del kéfir de agua en el Código Alimentario Argentino abre nuevas oportunidades para la industria alimentaria y para los consumidores interesados en mejorar su salud intestinal mediante probióticos naturales. Con el respaldo de la ciencia y la creciente demanda de alimentos fermentados, el kéfir está consolidando su posición como una bebida saludable y accesible en las góndolas argentinas.