Entre insultos, gritos, amenazas y festejos, Juliana Furia Scaglione, abandonó la casa de Gran Hermano. Con el 64,2% de los votos perdió contra Martin Ku, quien solo obtuvo el 36,7% de los votos. A penas al comienzo del programa, Santiago del Moro anunció un pico de raiting con 20 puntos.

La gala de eliminación se atrasó con el fin de generar más ansisas y expectativas en los furiosos y el resto del país. Los analistas no tardaron en asimilar la gran repercusión de la participante. Las palabras de Sol Peréz fueron claras: "Es una noche épica, una final adelantada. Son dos grandes jugadores". Mientras que, Gaston Trezeguet, arengaba: "Furia a la final". 

A tan solo minutos de pasada la media noche, el conductor ingresó a la casa y dio el veredicto final. En una postura de resignación, Furia se despidió de su aliado, Emma Vich, y Dario Corti. 

En paralelo agradeció a sus furiosos y al programa: "Gracias, gente. Gracias por todo lo que se alcanzó. Estoy muy feliz. Gracias". Sin embargo, no tuvo la misma actitud con Los Bros. Fiel a su estilo, la ahora exjugadora, no los saludó y sentenció: "Ustedes no me saluden, cacatúas asquerosos. Me trataron como una reina a último momento, pero son la misma mi... que siempre. Gracias por ser unos falsos". 

Finalmente, se despidió de la casa y del Big asegurando que fue una gran jugadora y que este Gran Hermano, es suyo.