Ajustes presupuestarios y sus consecuencias

La Fundación Huésped analizó el proyecto del Presupuesto General de la Administración Nacional 2026 y advirtió que la reducción de fondos para la respuesta integral al VIH y otras infecciones supone un "giro preocupante" en la estrategia sanitaria.

Según la organización, cada peso que no se invierte en prevención y diagnóstico temprano termina generando un mayor gasto futuro por el tratamiento de las consecuencias de la falta de inversión. Para la Fundación, esto refleja que la salud pública y los derechos humanos fundamentales no están entre las prioridades del Gobierno.

Prevención y diagnóstico en riesgo

El informe destaca que la Profilaxis Pre-Exposición (PrEP) y la Profilaxis Post-Exposición (PEP) quedan fuera del presupuesto de 2026, eliminando herramientas fundamentales para prevenir nuevas infecciones. Además, la distribución de preservativos sigue siendo insuficiente tras faltantes registrados en 2025.

Los diagnósticos también sufren un fuerte recorte: se proyecta la entrega de 581.000 test rápidos, un 49,3% menos que en 2023, y 116.215 pruebas de carga viral, número que no permite cumplir con la recomendación de dos controles anuales por persona. La falta de detección temprana aumenta la transmisión y debilita el principio de "Indetectable = Intransmisible" (I=I).

Reducción en materiales educativos y tratamientos

Los materiales educativos y preventivos prácticamente desaparecen del presupuesto, pasando de 275.565 unidades distribuidas en 2023 a cero proyectadas en 2026, afectando la concientización y el acceso al sistema de salud.

Otros recortes impactan tratamientos esenciales: la atención a pacientes con Hepatitis C disminuye un 44% y los de Tuberculosis un 11%. La Fundación Huésped advierte que estas reducciones podrían agravar la situación sanitaria y económica del país, al generar más complicaciones y mayor transmisión de enfermedades.