El Gobierno ajusta la estrategia para pagar la deuda de enero
Vencen más de USD 4.200 millones y crece la chance de un acuerdo financiero con bancos internacionales, en un contexto de tensión cambiaria y tasas altas.
Sobre el cierre de 2025, el Gobierno nacional avanza en la definición de la estrategia para afrontar los vencimientos de deuda previstos para enero, que superan los USD 4.200 millones. En el mercado crece la expectativa de que el pago se concrete mediante un REPO con bancos internacionales, utilizando bonos soberanos como garantía, mientras el dólar continúa bajo presión y las reservas muestran una baja.
Según fuentes financieras, la operación se realizaría con bonos BONAR 2035 y 2038, bajo legislación argentina, con un plazo estimado de dos años y una tasa algo inferior al 9%. Aunque aún no se conocen los detalles oficiales, el Tesoro ya transfirió fondos al Banco Central para avanzar en la operatoria.
Cómo se cubrirán los vencimientos y qué pasa con las reservas
El REPO implica la venta de títulos con un compromiso de recompra futura, mecanismo que permitiría obtener alrededor de USD 1.500 millones. A esto se sumarían USD 700 millones provenientes de la privatización de las hidroeléctricas del Comahue y otros USD 1.869 millones que el Tesoro mantiene depositados en el Banco Central por la emisión del BONAR 29.
Con estos recursos, el Gobierno podría cubrir los USD 3.700 millones que vencen en enero. Los USD 500 millones restantes corresponden al Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses. El impacto de esta estrategia comenzará a reflejarse cuando los mercados retomen la actividad plena.
En paralelo, las reservas del Banco Central cerraron el año con una caída de USD 727 millones, ubicándose en USD 41.165 millones, en una jornada marcada por subas en las tasas de interés y menor volumen de operaciones.
Dólar, acciones y bonos: el cierre de 2025 y lo que viene
El mercado cambiario estuvo atravesado por cambios en el sistema de bandas, que desde enero de 2026 se ajustarán según el último dato disponible del IPC. Con este esquema, el techo de la banda cambiaria subirá, lo que alimenta expectativas de mayor ritmo devaluatorio.
En el Mercado Libre de Cambios, el dólar mayorista cerró con una leve baja y terminó el año con una devaluación acumulada del 41%, por encima de la inflación. En los dólares financieros, el MEP y el contado con liquidación mostraron retrocesos moderados, mientras que el dólar blue también cerró a la baja.
La Bolsa local sintió el impacto de las tasas elevadas. El índice S&P Merval terminó la última rueda del año con caídas tanto en pesos como en dólares, aunque algunos sectores mostraron fuertes subas acumuladas en 2025, especialmente energía y servicios públicos. En tanto, los bonos soberanos operaron con escaso movimiento y el riesgo país se mantuvo estable.
De cara a la primera rueda de 2026, los analistas no anticipan un cambio de clima significativo. Enero suele ser un mes de mayor presión cambiaria y de fuerte demanda de dólares por parte del Tesoro, lo que convierte al tipo de cambio en una de las principales variables a seguir en el inicio del nuevo año.