Diciembre comienza con una batería de incrementos que impactarán de lleno en el bolsillo, a pesar de que las consultoras estiman que la inflación de noviembre se mantendría en torno al 2,3%, similar a la de octubre. Entre alquileres, transporte público, prepagas y servicios de comunicación, al menos seis aumentos entran en vigencia desde este sábado.

En el caso de los alquileres, los contratos aún regidos por la derogada Ley de Alquileres tendrán un ajuste del 28,67%, una cifra menor a los incrementos previos pero igualmente elevada para los inquilinos. El Índice de Contratos de Locación (ICL) del Banco Central continúa desacelerándose: en noviembre subió 38%; en octubre, 46,1%; en septiembre, 50,3%; y en agosto, 55,67%.

Las prepagas también ajustarán sus cuotas. Las empresas informaron aumentos de entre 2,3% y 2,4% para diciembre, que además se aplicarán a los copagos. Los usuarios pueden verificar detalles de cobertura y tarifas en la plataforma de la Superintendencia de Servicios de Salud.

El transporte público tendrá subas tanto en CABA como en la provincia de Buenos Aires. En la Ciudad, los colectivos aumentarán 4,3%, quedando el boleto mínimo en $593,27, mientras que los tramos de 3 a 6 km costarán $660,91; de 6 a 12 km, $711,83; y de 12 a 27 km, $762,78.

En la provincia de Buenos Aires, si avanza el esquema tarifario propuesto por la gestión de Axel Kicillof, las líneas del 200 en adelante aumentarán 14,4%: el boleto mínimo subiría de $573,09 a $655,61.

El subte también subirá en la Ciudad. El pasaje pasará de $1157 a $1207, mientras que el premetro costará $422,36.

Cable, telefonía, combustibles y tarifas: lo que se espera

Los servicios de cable y telefonía anticiparon otro ajuste para diciembre, con aumentos que llegarán hasta el 4%, dependiendo de la empresa y el plan del usuario.

En el caso de los combustibles, se espera que el Gobierno aplique una nueva actualización parcial del impuesto a los combustibles líquidos, lo que impactará directamente en el precio de la nafta y el gasoil. En noviembre, la Secretaría de Energía desdobló la suba impositiva, por lo que en diciembre se aplicaría el remanente pendiente de 2024 y los incrementos correspondientes a los dos primeros trimestres de 2025.

A esto se suma la política de precios dinámicos que YPF implementa desde agosto, con variaciones según zonas, horarios y niveles de demanda, lo que dificulta anticipar el valor exacto en los surtidores.

En cuanto a luz y gas, aún resta la formalización oficial de los aumentos previstos para diciembre, que rondarían el 2,3%, en línea con la inflación de octubre. Desde junio rige la Revisión Quinquenal de Tarifas (RQT), un esquema que habilita ajustes mensuales durante 30 meses en transporte y distribución, dos componentes centrales del costo final de las boletas.