El dato clave que permitió esclarecer el crimen del contador en Aguilares
Dos hermanos fueron detenidos tras el asesinato de José Antonio Romano en Tucumán.
El brutal homicidio de José Antonio Romano, hallado dentro de un freezer en su vivienda de Aguilares, comenzó a resolverse gracias a un detalle aparentemente menor. Las cámaras de seguridad captaron a Marcos Rafael Videz, de 24 años, usando dos aros grandes y brillantes, lo que permitió a la policía identificarlo a través de redes sociales y reconstruir los movimientos de los hermanos.
El crimen ocurrió el sábado 25 de octubre, cuando Romano salió de su casa en su camioneta Volkswagen Amarok blanca. Al día siguiente, su hermana encontró su cuerpo en la cocina, envuelto en cables y dentro del freezer.
Cómo se desarrolló la investigación
Las imágenes mostraron que Romano regresó a su domicilio cerca de la 1 a.m., acompañado por Marcos. Horas después, los hermanos permanecieron en la casa hasta aproximadamente las 4:30 a.m. y luego abandonaron el lugar en la camioneta, que más tarde dejaron en el barrio Villanueva.
Según los informes forenses, el ataque se produjo con un cuchillo -que aún no fue hallado- en la planta alta de la vivienda. Un vecino relató haber escuchado una discusión alrededor de las 2 a.m., que habría sido el inicio de la tragedia.
La confesión del padre y la imputación
El avance decisivo se produjo cuando Ariel Marcelo Videz, padre de los sospechosos, se presentó en la comisaría y relató que su hijo Marcos le había confesado haberse "mandado una macana". Ambos hermanos fueron imputados como coautores por homicidio agravado. El juez Martín Cacici resolvió una prisión preventiva de cuatro meses, a pedido de la defensa.
La causa sigue abierta mientras los peritos del Equipo Científico de Investigación Fiscal continúan recabando pruebas en la vivienda y el vehículo del contador, intentando determinar si hubo premeditación y el verdadero móvil del crimen que conmocionó a Tucumán.