El pequeño, cuya identidad se mantiene en reserva, continúa hospitalizado en estado reservado en la Clínica San Lucas, recibiendo asistencia respiratoria debido al perjuicio sufrido por estar expuesto al calor y encierro durante ese tiempo.

El lamentable suceso tuvo lugar el pasado lunes cuando los padres del niño estacionaron el automóvil en la intersección de las calles Chrestia y Elordi, aproximadamente a las 9 de la mañana, antes de dirigirse a sus respectivos trabajos. Sin embargo, según su declaración a las autoridades, admitieron haber olvidado llevar al niño a la guardería.

Fue solo alrededor de las 15 horas, cuando la madre regresó al vehículo, que descubrió al niño inconsciente en el asiento trasero. De inmediato, solicitó ayuda al servicio de emergencias, activando la intervención de la policía local. A pesar de los esfuerzos de reanimación, el niño no pudo ser despertado, siendo trasladado primero a la clínica San Agustín y luego al San Lucas.

Inicialmente, se sospechaba de posible violencia debido a los moretones encontrados en el cuerpo del niño, pero fuentes policiales confirmaron que estos fueron causados por el cinturón de seguridad de la butaca.

La causa, que aún no resultó en detenciones, podría ser investigada como un caso de "abandono de persona". La fiscalía de turno y la Defensoría de los Derechos del Niño, Niña y Adolescente están a cargo de la investigación, solicitando un informe médico completo sobre la salud del niño y una evaluación pericial.