El influencer estadounidense Alan Paredes, conocido en redes por sus videos de humor y crítica social, deberá abandonar la Argentina en un plazo de 30 días. La Dirección Nacional de Migraciones comprobó que permanecía de forma irregular en el país desde hacía más de dos años.

Pero más allá de su situación documental, lo que despertó sospechas entre las autoridades fue su estilo de vida. Paredes residía en un departamento de alto nivel en el barrio Norte de San Miguel de Tucumán, con detalles y comodidades poco compatibles con los ingresos que había declarado.

Un departamento que no coincidía con sus ingresos

Según confirmaron fuentes oficiales, el inmueble contaba con amplios ventanales, mobiliario de diseño, gimnasio privado y piscina en la terraza, además de un mantenimiento mensual elevado.

El creador de contenido solo había presentado un contrato laboral temporal de siete meses con una empresa local de transporte, lo que no alcanzó para justificar el nivel de gastos que mantenía.

"Su estadía superaba los plazos legales permitidos y su situación económica no resultaba clara", explicaron desde Migraciones. Ese informe fue clave para que el organismo emitiera la orden de expulsión y prohibición de reingreso al país por cinco años.

Humor, polémicas y burlas a los controles migratorios

Paredes se hizo conocido en redes sociales por mostrar su vida cotidiana en Tucumán, mezclando humor con observaciones sobre la realidad local. En varios videos bromeó sobre su situación migratoria, llegando a decir que "se casaría con una tucumana para quedarse a vivir".

En el último año también generó controversias al cuestionar gestiones municipales y exponer fallas en servicios públicos, a partir de esos videos que se viralizaron se hizo conocido.

De las redes a la expulsión

La resolución firmada esta semana le da a Paredes hasta fin de noviembre para abandonar el país. Si no lo hace, podrá ser deportado por la fuerza pública.

Hasta ahora, el influencer no se pronunció públicamente sobre la medida. Mientras tanto, su nombre vuelve a circular en redes, pero esta vez no por un video viral, sino por el lujoso departamento que terminó marcando su salida de Argentina.