La historia de Carnes Plant Based (CPB) comienza con Javier, Mariel, Ezequiel, Martín y Diego, amigos con profesiones diversas y rutinas opuestas. Aunque sus vidas eran muy diferentes, encontraron un punto en común: la comida. Aunque no todos eran veganos, la curiosidad, el interés por nuevos sabores y la conciencia sobre el impacto de la carne en el planeta los llevó a crear un emprendimiento que fusiona dos mundos aparentemente opuestos: la carne y el veganismo.

CPB, inaugurada en agosto pasado, ha experimentado un crecimiento constante. Los amigos buscan ofrecer opciones que imiten los sabores, texturas y recetas tradicionales de la carne, pero a base de plantas. Su enfoque es acercar estas alternativas no solo a veganos, sino a cualquier persona que desee probar una opción más amigable con los animales y el medio ambiente.

Aunque mantienen la creencia en la concientización sobre el consumo de productos de origen animal, destacan que no intentan engañar a nadie y que su objetivo es proporcionar opciones accesibles y deliciosas. A pesar de la complejidad económica del país, CPB ha ganado popularidad en el barrio y se prepara para expandirse a otras zonas. Su propuesta apunta a ofrecer una experiencia culinaria positiva y accesible, invitando a todos a disfrutar de platos tradicionales sin sacrificar el sabor ni la conciencia.