Argentina registró 90 femicidios en lo que va del 2025
El informe de La Casa del Encuentro alerta sobre la violencia estructural y la falta de respuestas estatales.
Entre el 1° de enero y el 30 de abril de 2025, en Argentina se registraron 90 femicidios de mujeres y niñas, y 6 femicidios vinculados de varones adultos, según el último informe del Observatorio de Femicidios "Adriana Marisel Zambrano", que dirige La Casa del Encuentro.
El impacto de estos crímenes es devastador: 83 hijos e hijas perdieron a sus madres, y el 48% de ellos son menores de edad. Más de la mitad de los femicidas (59%) eran parejas o exparejas de las víctimas, y el 66% de los asesinatos ocurrieron en la vivienda de la mujer o en un hogar compartido con el agresor. Una vez más, los datos confirman que el lugar más peligroso para una mujer víctima de violencia es su propia casa.
Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba encabezan los casos
Aunque los femicidios se extienden por todo el país, la provincia de Buenos Aires sigue siendo la que concentra más casos, seguida por Santa Fe, Córdoba y Mendoza.
La violencia de género es un problema estructural en Argentina. Así lo refleja también el informe "Perfil de País Argentina 2024" publicado en abril por ONU Mujeres, que advierte que la violencia contra las mujeres afecta a todas las edades, clases sociales y regiones, y señala un retroceso en políticas públicas debido a la dispersión institucional y la reducción de presupuestos, agravada por el Decreto 735/2024.
Alerta internacional por el retroceso institucional
El Comité de Expertas del Mecanismo de Seguimiento de la Convención de Belém do Pará (MESECVI) también expresó su preocupación ante el debilitamiento de los marcos legales e institucionales que garantizan el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia en el país.
A esto se suma una situación económica desigual para las mujeres, marcada por mayores niveles de desocupación, informalidad laboral, y una carga desigual en las tareas de cuidado no remuneradas, que limitan su autonomía económica y dificultan su salida de contextos violentos.
No todos los asesinatos de mujeres son femicidios
El informe recuerda que no toda muerte violenta de una mujer se clasifica automáticamente como femicidio: debe haber violencia de género como motivación, esté o no mediada por una relación afectiva. Por eso es clave analizar el contexto en cada caso.
La falta de una institucionalidad de género rectora a nivel nacional y el debilitamiento de las políticas públicas dificultan el trabajo de prevención y respuesta, y contribuyen a que los femicidios sigan ocurriendo con alarmante frecuencia.